España sucumbe en la prórroga

España no jugará la final del Europeo Sub-19 y eso es noticia, porque en los tres últimos años no se la perdió. Francia quebró la histórica racha de una forma especialmente dolorosa, aprovechando un regalo de la zaga española en la prórroga. La Sub-19 había hecho méritos antes para que ese tiempo extra no existiera y, cuando llegó, la suerte no le sonrió. España se despidió del torneo con su mejor actuación, en la que pagó muy caro un error puntual.
La Selección no dio una lección de tiqui-taca, pero a cambio exhibió un juego por las bandas que hizo daño constante a Francia, sobre todo en la segunda mitad. En la primera mandó Francia, dando siempre mayor sensación de peligro. Rabiot hacía daño en la mediapunta y Benzia en ataque, pero marcó primero España. José Rodríguez anotó un penalti dudoso sobre Vadillo, después de que el árbitro ignorase uno muy claro sobre Iker. No obstante, la alegría duró un minuto: Jean buscó el desmarque de Benzia, que definió por entre las piernas de Rubén, salvador de otras tantas, pero que nada pudo hacer ahí.

España salió intacta de la recta final del primer tiempo y tras el descanso cogió el mando. Gayá y Bellerín, los mejores del partido, se convirtieron en extremos y Francia sufrió hasta para pasar del medio del campo, sólo esperando el fallo de España. Vadillo tiró del carro de la Sub-19 y las ocasiones se sucedieron sin fortuna: Gayá, Borja, el propio Vadillo, Sandro... España mereció premio, pero no llegó y Hunou casi lo hace pagar.

Llegó la prórroga y flaquearon las fuerzas. Una torpeza al defender un córner acabó en el gol de Conte, lastre insalvable ya para España. Francia sacó oro casi sin esperarlo y jugará la final. A España, desacostumbrada, se le hará muy raro verlo desde casa...