Thiago quería irse, pero los 12 millones eran irrechazables

Thiago Silva y su familia no son felices en Francia y durante todo el verano no se lo escondieron a nadie de su entorno que su deseo era irse a vivir a España. Aunque públicamente el capitán de la selección brasileña no quiso forzar la situación, el Barcelona le quería y él quería irse al Barça. Pero lo que el jugador no se lo esperaba era que el Paris Saint-Germain le ofrecería renovar por tanto dinero menos de un año después de su fichaje: 12 millones de euros netos al año por cinco temporadas. La oferta era irrechazable y le hizo cambiar de idea.

Thiago Silva entra ahora en la lista de los veinte futbolistas mejor pagados del mundo. Si cumple su contrato hasta el final, sumados a los 10 millones que ganó la temporada pasada, son 70 millones en seis años.

Aunque tenga papel de protagonista en el PSG, sea líder del vestuario, capitán del equipo y esté jugando a un nivel que le pone entre los tres mejores centrales del mundo, el jugador y su familia no se han adaptado a París. El estilo de vida, el clima, la distancia de los amigos y la familia son los principales motivos; estaban seguros que en Barcelona serían felices. Durante sus vacaciones en Brasil, era común escuchar a la mujer del jugador hablar de su ilusión de ir a vivir a España.

París es una ciudad que no va con su estilo de vida porque Thiago Silva es un hombre casero, familiar y tranquilo, muy cercano a sus pocos amigos. Y en España están dos de sus amistades más cercanas, Marcelo y Neymar. Según el entorno del jugador, los internacionales brasileños intentaron convencer a Thiago Silva para que viniera a la Liga española.

Marcelo y él son amigos inseparables y su relación viene de la cantera del Fluminense, en Río de Janeiro. Comparten habitación en la selección y se comunican constantemente durante la temporada europea. Marcelo le habla maravillas de la vida en España, del clima y la comida. El hecho de vivir en Barcelona y más cerca de su amigo ya era un factor antes del fichaje de Neymar por el equipo azulgrana, lo que reforzó su deseo. Se hicieron muy amigos en la selección, coincidieron en sus vacaciones en Brasil y el exjugador del Santos terminó de convencerle de venir al club catalán.

La iniciativa del París Saint-Germain es inteligente y evita la posibilidad de una situación parecida a la que está viviendo hoy el Tottenham con Gareth Bale. El galés se ha rebelado contra la actitud de su presidente, que habría rechazado una oferta de 93 millones de euros del Real Madrid por él. Bale se ha borrado de los amistosos que ha disputado el Tottenham en Hong Kong para forzar su salida al club blanco.