FÚTBOL | EUROCOPA
Quereda: "Vamos a por todas; la calidad de las jugadoras está ahí"
El seleccionador reconoce que España está evolucionando más despacio que el resto de países, pero avisa de su ambición. El viernes debuta ante Inglaterra.
¿Cómo explica que España haya tardado tanto en volver a una Eurocopa?
La evolución de nuestro fútbol femenino es la que es. Estamos siempre en esa segunda línea. Podía haber sucedido en cualquier momento. Ha sido esta vez, pero podía haber pasado en las tres anteriores, donde hemos peleado, incluso en los playoffs.
Hay muchas coincidencias entre la Eurocopa de 1997 y la de ahora: en rivales (repiten Francia y Rusia) y sobre todo, en que la Selección llegaba con la etiqueta de novata. ¿Puede suceder lo mismo que entonces, que España dio la campanada?
Lo vamos a intentar. La calidad de las jugadoras está ahí y categorías las inferiores vienen muy bien posicionadas, son jugadoras importantes. De hecho, hemos incorporado jugadoras de la Sub-19 del pasado año y en ese sentido somos muy optimistas. No vamos a renunciar a nada. Vamos a ir a competir, aunque también vamos a ir a disfrutarla.
¿El hecho de ir de ‘tapada’ beneficia o perjudica a España?
Ni una cosa ni otra. Lo que hay que hacer es mentalizarnos y seguir trabajando como hasta ahora durante estos días, con esta intensidad, concentración e ilusión y con esas ganas que tienen las jugadoras. Eso es lo fundamental.
España llega con una menor preparación que el resto de las selecciones y con menos amistosos, tres frente a una media de siete de la mayoría de las selecciones. ¿Nos puede perjudicar?
Tenemos la preparación que podemos tener. Está claro que la española es una liga muy larga, con muchos equipos, no hay fechas libres y tampoco queremos perjudicar a los clubes en sus competiciones. Vamos a ver la clasificación del próximo Mundial, en septiembre, donde nos vamos a volver a encontrar con este problema, pero no podemos quejarnos. Es la realidad que tenemos y a ella nos tenemos que adaptar. El resto tienen amistosos porque son un máximo de 10 o 12 equipos y hay muchas fechas libres y respetan las fechas FIFA. En ese sentido, nosotros estamos contentos y muy agradecidos por cómo la Federación se vuelca con el trabajo cuando solicitamos hacerlo, pero encajar unas fechas determinadas en esos momentos que organizan los torneos hasta ahora no ha sido factible. Vamos a trabajar de cara al futuro para que sea posible.
¿Ha cambiado mucho esta Selección respecto a aquella de 1997?
Muchísimo. En esa época andaríamos por las 8.000 o 10.000 licencias y en estos momentos estamos alrededor de 28.000. Es un paso importante. En ese momento habría unos 100 clubes y ahora estamos por encima de los 300. Había 6 o7 federaciones territoriales con fútbol femenino y hoy lo tienen todas.
¿También han cambiado nuestros rivales?
Nuestra evolución está siendo más lenta de lo que nos gustaría y ellos están yendo un poco más rápido. La evolución aunque sean pasos más cortos, están muy bien asentados y estamos recogiendo ahora los frutos.
¿Cuál es el objetivo real para esta Eurocopa?
Vamos a ir partido a partido, pero sin renunciar a nada. Nuestro objetivo y nuestra ilusión es llegar a lo más alto posible, luego ya veremos la realidad y los partidos dónde nos sitúan.
España tiene una jugadora que destaca, Vero Boquete. ¿Hasta qué punto es importante en la Selección?
Ella es una jugadora más dentro del bloque, aunque sí que es verdad que tiene una experiencia y un desarrollo. Es una de las jugadoras que han salido fuera y en el extranjero están madurando mucho más rápido que en España y en la Selección nos beneficiamos de eso.
Precisamente en la prelista de 40 llegó a incluir a una de las futbolistas que juegan fuera, Natalia Pablos, del Bristol inglés. ¿Llegó a plantearse llevarla a la Eurocopa?
Claro que en un principio se nos pasó por la cabeza llevar a Natalia, pero luego surgió la duda de a quién quitas. Éstas son las jugadoras que nos han clasificado para la fase final. Ha primado el esfuerzo, el trabajo, el sacrificio y lo bien que lo han hecho durante este tiempo. Ellas son las que nos han traído hasta aquí y ellas son las que nos tienen que representar. En un futuro la incorporación de otras jugadoras es inevitable, pero sobre todo manteniendo este bloque.
Durante años Laura del Río ha sido una de las jugadoras claves de España. ¿Da por terminado su ciclo en la Selección?
Laura no está aquí y sin ella hemos afrontado esta fase de clasificación y felizmente hemos conseguido el objetivo. Son cosas naturales que van sucediendo, como el año que viene igual habrá alguna que tampoco venga, bien porque lo deje o porque vaya buscando otros horizontes en sus vidas. Todo esto es lógica porque del fútbol, por desgracia, la mayoría de las chicas no viven de esto y tienen que buscarse su futuro.
Ha apostado por jugadoras muy jóvenes, Virginia, Alexia, Nagore, Amanda…
En la Selección apostamos por aquellas jugadoras que llaman a la puerta, porque la puerta está abierta. De hecho ya hay algunas incorporaciones y no tenemos en el olvido a otras que vienen apretando. El futuro son ellas; el presente, el que tenemos.
¿Cuáles son las mejores armas de España?
Sobre todo, el tema técnico y el tema mental. Ahí hemos trabajado mucho porque todavía nuestra competición no nos ha dado esa seguridad de hacerlo durante tantísimo tiempo, con tantísima concentración y durante tantos minutos. Entonces a veces tenemos esos altibajos y eso es lo que estamos intentando corregir en el terreno de juego y también el aspecto mental en el vestuario. Ese es un factor que nos va a ayudar. Y luego, sobre todo, el grupo humano que hemos conseguido formar. Aquí no hay ni una discrepancia. Es un grupo con una calidad humana impresionante.
Las jugadoras que ganaron el bronce en 1997 aseguran que tiraron de casta. ¿Es otra de las características de estas jugadoras?
Sí, la intensidad y el ritmo con el que entrenan, ese inconformismo, ese querer ser cada día mejores... La meta es ser un día campeonas de Europa, ése es nuestro objetivo, en ello estamos trabajando y esa mentalidad tienen.
Ignacio Quereda lleva 25 años al frente de la Selección. ¿Le queda energía suficiente para seguir?
Mientras la ilusión la siga teniendo y la junta directiva y el presidente al frente sigan confianza en mí, no tengo ningún inconveniente en seguir. Es un fútbol por el que hay que pelear todavía mucho y tenemos que terminar de consolidarlo.