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MUNDIAL SUB-20

Derik rememoró ante México su etapa de delantero centro

Derik crece en la Sub-20 y en el Madrid a pasos agigantados. Apoyos y referentes no le faltan, desde luego: "De niño nunca me fijaba en los defensas..."

Turquía
Derik

Central de profesión, delantero de espíritu. Como Sergio Ramos. Como Puyol. Como tantos otros que empezaron jugando en punta y acabaron en la zaga. El madridista Derik marcó el gol del empate ante México en la remontada de octavos y rememoró así sus inicios en el mundo del fútbol, en los que era un potente y certero ariete: "Al principio jugaba arriba, pero poco a poco fui retrasando posiciones. Supongo que crecí físicamente y los entrenadores me vieron fuerte para ser central. Al Madrid llegué siendo mediocentro, en Benjamín A. Jugué las dos primeras temporadas ahí y luego pasé a la defensa. Sebastián Parrilla fue el primero que me probó en ese puesto. Y hasta hoy. Ahora es segundo entrenador del Madrid C".

Pero antes del Madrid, antes de que sus padres se decidieran a aceptar la propuesta del club blanco, hubo más: "Empecé jugando en el Manila Estrellas, un equipo de Manuel Becerra, en Madrid. Era un equipo de fútbol sala. Entré con seis años y estuve un par de temporadas. Luego fui al Santa Ana y sólo un año después al Madrid. Era la temporada 2002-03. En el Manila Estrellas, mi primer equipo, marqué más de cien goles en una temporada. Fue el récord, aunque eso sólo pasa de niños. Ahora si puedo marcar bien y, si no, no pasa nada. De hecho, en el vestuario me vacilaron después del partido ante México. Me decían 'killer' del área y eso".

De padre nigeriano y madre española, con un hermano que vive en Londres y que dejó el fútbol después de jugar también en varios clubes de barrio, como él, Derik crece en la Sub-20 y en el Madrid a pasos agigantados. Apoyos y referentes no le faltan, desde luego: "De niño nunca me fijaba en los defensas, sino en los delanteros. Pensaba que iba a ser uno de ellos. Pero fíjate lo que son las cosas. Ahora miro mucho a Ramos, a Varane, a Pepe, a Carvalho... Todos con los que he podido entrenarme y aprender. Gente con carácter. Antes no hablaba mucho en el campo, pero en infantil A me dijeron que tenía que hacerlo más y desde entonces doy muchas órdenes. Me gusta".