ALMERÍA
Día de homenaje y visitas institucionales tras el ascenso
Corona y Javi Gracia reciben el Escudo de Oro de la ciudad. Pasaron por Ayuntamiento, Diputación y por la Parroquia de la Vírgen del Mar.
Jugadores, cuerpo técnico y resto de operarios del Almería cumplieron ayer con los compromisos institucionales y religiosos que se suelen llevar a cabo cuando se consigue un título o se logra un ascenso. Tras el baño de masas que los héroes del ascenso se dieron en el autobús descapotable la noche del sábado, ayer tocó relajarse, pero de cara al público.
La primera cita del día fue en la sede de alcaldía del Ayuntamiento de Almería. Allí, el alcalde la ciudad, Luis Rogelio Rodríguez Comendador, agradeció a los jugadores “haber devuelto a Almería al mapa” y se le concedió al técnico Javi Gracia y a Miguel Ángel Corona el Escudo de Oro de la Ciudad como reconocimiento por sus éxitos deportivos. El entrenador quiso repartir los halagos: “Entiendo que esta distinción es un reconocimiento al trabajo de mucha gente. Yo lo recojo como entrenador pero es para los trabajadores y todos los que día a día han trabajado para conseguir este éxito deportivo”. Miguel Ángel Corona hizo lo propio y habló como un almeriense más: “Hace siete años que aparecí por aquí. Venía con un contrato de cesión de un año y van siete. Ya no me podéis echar (entre risas). Me siento orgullo de que aunque no haya nacido aquí se me haya dado la oportunidad de sentirme uno más”.
Posteriormente, tras la protocolaria foto de familia, la plantilla se desplazó hasta el edificio de la Diputación Provincial donde les aguardaba su presidente, Gabriel Amat, quien les deseó futuros éxitos destacando la importancia del que ya han conseguido. Allí, el presidente Alfonso García tomó la palabra: “Vamos a luchar como hacen otras grandes ciudades españolas para ser representadas por su equipo. Quiero agradecer al cuerpo técnico y a la plantilla el enorme trabajo que se ha hecho para lograr el objetivo. Ha habido momentos buenos pero también malos tal y como pasa siempre, pero se han superado con esfuerzo y se ha conseguido un éxito impresionante. Hemos vuelto. Gracias por vuestro apoyo y comprensión”.
La última visita del día tuvo como destino la parroquia de la Virgen del Mar, la patrona de la ciudad. Allí los jugadores le realizando una ofrenda floral (como la que se le realiza cada verano) pero en esta ocasión para agradecerle el apoyo prestado en la consecución del ascenso. Y así terminó la fiesta. Acaba una temporada y breve comienza otra. Habrá varias marchas, una posible es la salida del guardameta Esteban al Oviedo, el club que le vio crecer, pero también renovaciones, como las de Corona y Soriano, los dos capitanes de esta temporada. Su peso en el vestuario sirve de hilo conductor para el resto de la plantilla.