Los campeones, uno por uno

Julen Lopetegui, que mañana mismo viaja a Turquía para dirigir a la selección Sub-20 en su nuevo reto, el Mundial de esa categoría (atención a los Jesé, Deulofeu, Oliver Torres y compañía), ha dirigido con tino un grupo de grandes jugadores que, además, se ha comportado como un colectivo perfecto y maduro. Con automatismos de club, buena convivencia y carácter ganador. El torneo ha sido perfecto desde el punto de vista de la gestión del grupo y del trabajo. Resultó innovador hasta el sistema de entrenamiento, basado más en el descanso que en el día a día en el césped. El 4-3-2-1 resultó un éxito, manejó bien desde fuera el debate Morata-Rodrigo y su plan de dejar libertad absoluta de movimientos a Isco y de liberar a Thiago con la inclusión de Koke resultó fundamental para la consecución del título por el bien que le hizo al jugador y a la selección. Este fue el uno por uno de nuestra Selección en la Europa aunque el núcleo estuvo formado especialmente por 13 futbolistas: diez titulares fijos, Morata

David de Gea. Cierra el ciclo de la Sub-21 igualando las internacionalidades de Santi Denia y demostrando que esta Eurocopa ya se le quedaba pequeña. Su próximo paso es la Absoluta en la que, eso sí, podría costarle unos años ser el habitual con Casillas y Valdés por delante. Ha jugado un gran Europeo, con paradas inverosímiles como la que le hizo a Van Hoorn en la tercera jornada ante Holanda y con una decisiva a Florenzi en la final con 1-1 en el marcador. Bien por arriba y con temple. Es el portero titular de un gigante: el Manchester United. No se podía esperar menos.

Montoya. En la carrera por ser el recambio futuro de Daniel Alves. Hacia arriba es fabuloso. Tiene un sentido ofensivo muy bueno del juego, aunque a veces hace diagonales y pierde balones peligrosos. Es el único matiz que le hace falta corregir, pero.

Marc Bartra. Los jugadores se hacen así, con partidos. Y Bartra ha demostrado que con minutos puede ser un central para el Barcelona. Sabe qué significa jugar en una defensa con muchos metros detrás de él. Sabe sacar la pelota jugada y va con valentía por arriba.

Íñigo Martínez. Si la Eurocopa era una prueba para lo que le espera desde este verano en la Champions, ha salido reforzado. Segurísimo, sin complicarse atrás y con los movimientos muy mecanizados, ha ofrecido un nivel altísimo aunque es cierto que en la final sufrió ante Inmobile, que le despistó en el gol del 1-1.

Alberto Moreno. Una de las grandes sorpresas del campeonato. Impecable desde el lateral izquierdo. Agresivo en defensa, preciso en el toque para salir con el balón jugado. Con proyección en ataque, casi hace un gol de bandera a Noruega en semifinales. Fenomenal, aunque Florenzi y también Inmobile por su zona le pusieron en problemas en la final. Para mucho más que para tener ficha del Sevilla Atlético…

Illarramendi. Un veterano Sub-21 que detecta el espacio donde no hay compañeros para colocarse allí, ofrecerse y volver a distribuir. Y lo mismo para cortar. Preparado para altas cotas. Sólo le faltó el gol en el campeonato y bien que lo mereció porque se acercó muchas veces. Coronó su gran Europeo con una actuación sobresaliente en la final.

Koke. Empezó como suplente pero las sensaciones irregulares del partido ante Rusia invitaron a Lopetegui al cambio. En un trabajo oscuro, de rompe y rasga, sirvió de gran ayuda a sus compañeros. Trabajo de intendencia y solidario. Por ese motivo, disparó a puerta menos de lo que acostumbra.

Thiago. Una final para el recuerdo, con el primer hat-trick de la historia en una final a partido único. Otro jugador que ya está en modo selección absoluta si se convierte en constante. Es clarividente, tiene regate y pase para crear situaciones de superioridad y dotes de organización. Un escalón más y será un fijo en la Absoluta. Doble campeón de Europa.

Isco. El jugador del torneo. Dos prodigios de goles,otro de penalti en la final, asistencias, regates de todos los colores. Su repertorio ha completado el que había mostrado en el Málaga durante la temporada y ha terminado de impresionar en Europa. Le espera un grande.

Tello. No estuvo a un nivel exuberante aunque es cierto que, en muchos partidos, fue desplazado de su situación ideal en beneficio de Isco. A pesar de no estar brillante, posee la condición que casi más cara se paga en el fútbol actual .La velocidad le convierte siempre en un factor desequilibrante. Como en la final, en la que forzó el penalti decisivo. Y, en cuanto tuvo espacio, fue un tormento para la defensa.

Morata. Titular sólo dos veces. Ante Holanda con el pase a semis garantizado y el día de la final. Trabajó ese puesto y se lo ganó a pulso. Marcó ante Rusia, Alemania, Holanda y Noruega. Ha aprovechado la oportunidad que representa este campeonato para jóvenes talentos. Convirtió los minutos en goles y ya se ha hecho un nombre. En la final, dio la asistencia del 1-0 de Thiago. Ahora está en su mano seguir en el Madrid o salir, opción que tal vez sea la más conveniente para él para seguir con esa estupenda progresión.

Rodrigo. Suplente los días que Morata fue titular, no tuvo su mejor torneo. Tal vez le pesó la temporada en el Benfica, larga y con tres decepciones seguidas al final. Estuvo algo falto de confianza aunque hizo un gol importante en semifinales ante Noruega que abrió el camino para llegar a la final.

Muniain. Perdió su condición de titular después del primer partido, en el que estuvo impreciso. Asumió bien la condición y ayudó al grupo en los minutos que le dieron. Un buen detalle del jugador del Athletic, cuya explosión se ha frenado algo en los últimos tiempos. Le toca liderar a él la nueva generación de la Sub-21.

Pablo Sarabia. Tello e Isco le dejaron sin sitio pero jugó un partido fabuloso ante Holanda que debería abrirle un mejor futuro en Primera. Gran técnica, gran visión de juego.

Nacho. Suplente de Alberto, sólo jugó ante Holanda. Estaba para más, pero la sorprendente actuación del lateral del Sevilla le dejó sin más minutos. Su próximo objetivo, tener continuidad ya en la élite.

Ignacio Camacho. Mala suerte para el malaguista. Ha topado con Illarramendi y para colmo se lesionó en el partido ante Holanda, lo que le dejó con el tobillo tocado para el resto del torneo. Jugador muy apreciado en el cuerpo técnico por su capacidad para hacer grupo. Contagia espíritu, factor importante en un torneo corto. Jugó unos

Álvaro. Un jugador consolidado en Primera pese al descenso del Zaragoza que se vio sin minutos por la excelente actuación de Marc Bartra e Ínigo Martínez. También jugó el partido ante Holanda. Correcto.

Carvajal. Montoya partió con ventaja respecto a él y Lopetegui decidió respetar la defensa que no había encajado ni un solo gol durante el campeonato. Para él, empieza un nuevo reto ahora

Álvaro Vázquez. Un gol y casi otros dos en su único partido. Un poco detrás de Rodrigo y Morata para Lopetegui, es un jugador con todas las condiciones para triunfar. Si mejora su relación con el gol, se asentará en la élite.

Canales. Desde Valencia fue un hincha más, como prometió cuando se lesionó al principio del campeonato con una rotura de fibras. Estaba destinado a tener un papel protagonista como desatascador del campeonato pero volvió a tropezarse con el infortunio. Su próximo paso es más difícil, la Absoluta, y le obligará a un esfuerzo máximo en el Valencia

Muniesa. Tuvo unos minutos testimoniales, y como mediocentro, en el partido ante Holanda. Él seguirá en la Sub-21 y, como lateral o central, tendrá oportunidades. Una buena experiencia para él después de tiempos de lesiones.

Joel. Cumplió años durante el torneo, 23. Acaba en la Sub-21 y no lo pudo hacer con minutos. De Gea es mucha faena. Futuro incierto pero, como él mismo dijo en AS, “medio pie fuera” del Atlético. Todo apunta que en la Premier League y, tal vez, en el Everton.

Mariño. El portero del Villarreal tampoco tuvo minutos. También cierra su ciclo en la Sub-21 y debe esperar para ver cuál será su futuro con Marcelino en el Villarreal.