ATHLETIC | Adiós a la Catedral
Butacas, ladrillos y tornos: tesoros para recordar La Catedral
Hubo un elemento que se sumó ayer con fuerza: el ladrillo. Se pudo comprobar a lo largo del día cómo se arrancaban varios de la fachada. Era la tarea más sencilla.
La afición del Athletic no se conformó con la gran noche de homenaje de despedida a San Mamés, que fue más que brillante. Las joyas rojiblancas, sus viejos leones, pusieron la emotividad a un cierre inolvidable. Iribar y Guerrero fueron los más aclamados.
Pues a los seguidores no les bastó el trofeo sentimental. Y algunos de ellos, los más jóvenes, hicieron acopio de butacas (volaron trescientas), trozos de césped (desaparecieron los dos puntos de penalti), señales de las localidades e incluso algún torno. Todo vale como memoria de La Catedral.
Hubo un elemento que se sumó ayer con fuerza: el ladrillo. Se pudo comprobar a lo largo del día cómo se arrancaban varios de la fachada. Era la tarea más sencilla, no había que colarse al estadio. El Athletic ha organizado una venta de trozos de césped enmarcados y en metacrilato, pero no basta. Además, un joven fue detenido de madrugada cuando intentaba robar el camión que cargaba con el material empleado para la fiesta del miércoles. La demolición acabará a finales de agosto.