Molinos deja la presidencia y no seguirá ni de consejero

Fernando Molinos deja la presidencia ejecutiva del Real Zaragoza, y muy probablemente tampoco continuará como consejero de la sociedad anónima deportiva, como se había llegado a plantear en las últimas horas y tras el descenso a Segunda División. Va a seguir en sus funciones durante dos o tres semanas más —su contrato profesional vence este 12 de junio—, ayudando en la planificación de la próxima temporada, pero, una vez que Agapito Iglesias haga oficial el nombramiento de su sucesor, Molinos, como precisó ayer AS, regresará a Barcelona, donde tiene su casa y su familia más directa.

Molinos firmó por una temporada y su deseo siempre ha sido el de no alargar más su vinculación laboral con el Zaragoza. La caída del equipo a la Segunda División le va a obligar a permanecer unos días más en la presidencia, dando su opinión sobre algunas cuestiones deportivas y de índole organizativo, pero aquí acabará su relación con el club.

Consejo en Madrid. Agapito reunió ayer en Madrid a su consejo de administración para decidir sobre las cuestiones más urgentes del Real Zaragoza, especialmente la salida ordenada de Fernando Molinos y la búsqueda del sustituto de Manolo Jiménez, al que le resta una temporada más de contrato con otra opcional, pero que, como ya informó este periódico el pasado lunes, no pilotará el Zaragoza 2013-14. El propio Agapito Iglesias ya le ha comentado al representante del técnico andaluz, Carlos Bucero, su decisión y en breve se va a empezar a negociar la rescisión de su contrato.

Molinos, Checa y Cuartero se desplazaron a media mañana en AVE hasta Madrid y allí se reunieron durante seis horas con Agapito y el también consejero Guerra. A última hora de la tarde y en un enigmático comunicado, sin ningún detalle, el Zaragoza informó que “el consejo de administración continuará trabajando en la reestructuración del Club en todas sus áreas y su adaptación a la nueva realidad en la que se encuentra desde el pasado sábado”.