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Real Madrid

La renovación por el Madrid de Cristiano Ronaldo sigue parada

El crack portugués tiene decidido acabar contrato en el año 2015 y luego irse del Real Madrid. Los elogios de Florentino Pérez los ve solamente como arma electoral.

Cristiano Ronaldo, a su llegada ayer a la concentración de Portugal en Óbidos.
EFE

La renovación de Cristiano sigue siendo una piedra en el zapato de Florentino Pérez. A pesar de que en los últimos días el presidente blanco se ha deshecho en elogios hacia el crack portugués ("es el mejor jugador del mundo y quiero convertirlo en el mejor pagado; queremos que nuestro proyecto gire en torno a él"), éste no ha cambiado su decisión de cumplir su contrato (que finaliza en 2015) y posteriormente abandonar el Real Madrid.

Así que mucho tendrá que seguir esforzándose Florentino para lograr convencer a Cristiano quien, por cierto, cree que el hecho de que el presidente le haya elogiado más en una semana que en los cuatros años que lleva en el club viene motivado exclusivamente por el proceso electoral.

Archiconocido es el malestar de Cristiano con el presidente, como quedó públicamente patente el día de la foto oficial de esta temporada, cuando el portugués saludó cariñosamente a Di Stéfano, pero fue muy frío con Florentino. De ahí que en las últimas semanas el mandatario haya intensificado las conversaciones con Jorge Mendes, representante del jugador, para tratar de limar asperezas con el crack e intentar acercar posturas para una mejora y ampliación de contrato. La intención es que se prolongue hasta junio de 2018, tres años más del acuerdo actual. Sin embargo, el delantero siempre se mostró reacio a ser utilizado como arma electoral y ha reconocido a sus allegados que una hipotética renovación por el Madrid aún estaría muy lejos de producirse.

Uno de los aspectos que Cristiano más echa de menos en el Madrid es la protección del club ante los ataques externos que ponen en duda su profesionalidad. Y eso parece que sigue sin resolverse, como se pudo comprobar el pasado domingo, tras insinuar José Mourinho, en declaraciones a Punto Pelota, que Cristiano había sido uno de los futbolistas que no habían querido jugar los dos últimos partidos (ante Real Sociedad y Osasuna) fingiendo lesiones.

Paso. En ese momento, nadie del club salió a defender la profesionalidad y el compromiso de Cristiano ni del resto de jugadores aludidos, dando así por buenas las palabras del técnico portugués. Florentino ha dado el primer paso para convencer a Cristiano de que renueve, pero todavía falta mucho para que logre el "sí" del delantero. Además, al portugués le llama la atención que los dos fichajes estrella que tenía en cartera el club, el del brasileño Neymar, que ayer fue presentado por el Barça, y el de Gareth Bale, estrella del Tottenham, sean jugadores que ocupan en el campo la misma demarcación que él.

El jugador que ha sido capaz de firmar 201 goles oficiales con el Madrid en sólo 199 encuentros (más de un gol de promedio) se vio sorprendido y decepcionado cuando se enteró por los medios que Florentino estaba dispuesto a invertir 100 millones de euros en contratar a Neymar pese a ser un jugador que no ha debutado en Europa y cuyo rendimiento está por ver. Que el club no haya priorizado esa fortísima inversión en asegurarse la continuidad de Cristiano es lo que tiene desconcertado al portugués. Pero la actual insistencia de Florentino en el tema podría desbloquear la situación.

Sea como fuere, la renovación de Cristiano no es algo que esté próxima, ni muchísimo menos. Mala noticia para una afición que la considera prioritaria e imprescindible.