Enfado de Cristiano con Mou: viajó para quedarse en la grada

Mourinho se ha propuesto salir del Madrid sin cerrar ninguno de los enfrentamientos que ha tenido con los pesos pesados de la plantilla. Con Casillas y Pepe relegados al ostracismo, el técnico está pasándole su factura a Cristiano. Desde el pasado 15 de febrero, fecha en la que ambos tuvieron una dura discusión en el vestuario del Bernabéu, provocada por unas injustas recriminaciones del técnico al crack, su relación es inexistente.

Pero, lejos de tratar de limar diferencias, el técnico ha tratado de dejar en evidencia a Cristiano. Primero le responsabilizó hace unas semanas, en la previa del Valladolid, del mal inicio de temporada del equipo, afirmando que "empezamos la Liga tristes, estábamos tristes y como estábamos tristes no hemos estado a tope y hemos perdido partidos que no debimos perder", en clara alusión al momento en que Cristiano hizo público su malestar con el club.

Pero no conforme con esa puya, el técnico dio un paso más para molestar al crack y el sábado le incluyó en la lista de convocados para el choque de ayer sabiendo que el 7 no estaba en condiciones de jugar por molestias en la espalda. De hecho, Cristiano fue el jugador descartado y vio el encuentro desde la grada. Este viaje en balde no gustó nada a la estrella, ya que el resto de lesionados sí que se quedaron en Madrid, y abandonó Anoeta bastante enfadado. De hecho, no esperó a que concluyera el encuentro. Fuera le estaba esperando un vehículo que lo trasladó al aeropuerto de Foronda (Vitoria) y allí tomó un vuelo privado a Portugal aprovechando que tiene dos días libres el equipo. Pero su enfado es evidente porque podía haber vuelto con la expedición a Madrid y después volar a su país.