El Depor se juega la vida en el adiós de Manuel Pellegrini

El Deportivo es un equipo que ha jugado numerosas finales. Se salvó de irse  a Segunda B hace un cuarto de siglo gracias a un recordado gol de Vicente al Racing en el minuto 96. Superó una promoción ante el Betis (1992). Perdió una Liga en el último minuto. Ganó otra y dos Copas del Rey. Remontó un increíble 4-1 al Milán. Descendió a Segunda. Volvió a Primera...  Hoy se juega, más allá de la categoría, la supervivencia. Y tiene en Málaga la oportunidad de encauzarla y hasta de salvarse si el Zaragoza no gana al Betis en el Benito Villamarín.

¿Qué Málaga se va a encontrar el cuadro gallego? Barruntamos un equipo en liquidación por fin de ciclo: el de un jeque, Abdullah bin Nasser Al-Thani, que puso un dineral para traer a Pellegrini, Isco, Joaquín, Delichelis o Baptista y que, aburrido de su juguete, no se sabe por qué o por quienes (juzguen ustedes) cerró el grifo. El Ingeniero se despide de una afición que le adora. Se irá al Manchester City acompañado por su cuerpo técnico y, posiblemente por Isco. Joaquín apunta a la Fiorentina, Demichelis y Saviola puede que a Argentina, Baptista quizás a Brasil y hasta se ronronea que Jesús Gámez ha sido reclamado por el Southampton de Mauricio Pellegrino. Lo que se dice una estampida en toda regla.

Los coruñeses pueden aprovechar el estado de esparcimiento de un adversario agotado, exprimido y sin oxígeno, pero rebosante de dignidad y que precisa de un punto para engancharse (TAS mediante) a la Europa League. Reencuentro de Fernando Vázquez con Joaquín a quien promocionó cuando entrenó al Betis. El hambre del Deportivo contra el corazón del Málaga.