El día del campeón

La segunda parte de la celebración del título, la primera fue la rúa del pasado lunes por las calles de Barcelona, llega al Camp Nou como epílogo del intrascendente partido que disputarán el Barcelona y el Valladolid. Los catalanes ya son campeones matemáticos y los castellanos certificaron una más que meritoria salvación hace una semana.

Ambos equipos, además, han llegado al tramo final de la temporada muy justos de fuerzas. En ambas escuadras, la limitación de efectivos (apostaron ambos técnicos por plantillas cortas) han acabado por pasar factura física y el mes de mayo se les está haciendo cuesta arriba. Por tanto, el espíritu de celebración que presidirá el partido puede derivar en un entretenido espectáculo de fútbol por fútbol a poco que ambos conjuntos, que comparten buen gusto, se lo propongan. Si en cambio aparece la molicie, las tarde se aventura plomiza.

En el Barça, si no media sorpresa como en las dos últimas semanas, Valdés regresará a la portería para comandar de nuevo una defensa que se sostiene con alfileres. Con Puyol lesionado, Adriano y Alves son duda a causa de sus molestias musculares y ayer no pudieron trabajar con el resto del grupo. Por contra, Mascherano recibió el alta médica, pero no juega desde la ida de los cuartos de final de la Champions ante el París Saint Germain.

En ataque, el Barça ya sabe que no podrá a volver a contar con Messi y por tanto se abre una nueva oportunidad para que Fàbregas se reivindique desde la punta de ataque ya sin la presión de ganar los puntos

Deberes hechos. En el bando pucelano, también reina la tranquilidad propia del estudiante que ha hecho los deberes con antelación.

El equipo de Djukic visita el Camp Nou salvado a falta de tres jornadas tras haber propuesto un fútbol muy del gusto de los espectadores. Unicamente la baja de Ebert, con gripe esta vez, evita que presenten su once de gala.

Villar entregará la Liga, fuegos artificiales y ¿parlamentos?

El Barça recibirá la Liga de manos del presidente de la RFEF, Angel María Villar, al final del partido para así no interferir en el encuentro. No obstante, el Valladolid ya ha anunciado que hará el pasillo al Barcelona. Tras la entrega de la Copa, los jugadores darán la vuelta de honor al estadio y se realizará un piromusical como fin de fiesta. Lo que no está claro es si, como en anteriores ocasiones, esta vez los jugadores se dirigirán al público desde el centro del campo. Las críticas recibidas por su comportamiento en la rúa no les han sentado demasiado bien.