LEVANTE
JIM reconoce la fractura y pide un último esfuerzo a la plantilla
JIM quiso ayer hacer terapia con un grupo resquebrajado. Les pidió un último esfuerzo para conseguir el objetivo de la permanencia en este tramo final de Liga.
Hace ya bastante tiempo que el vestuario del Levante es un avispero. La mala relación de algunos futbolistas con el cuerpo técnico y, en concreto, con la figura de Juan Ignacio Martínez viene de lejos. Pero parece que tras el ya comentado descanso del día del Deportivo todo ha ido a más y la situación se ha agravado trasladándose incluso entre compañeros. El clima y el ambiente, que normalmente era de bromas y risas, se ha convertido en mal rollo, algo que ha ido en aumentó, además, con la grave crisis de juego y resultado que atraviesa el equipo.
Y por todo esto precisamente JIM quiso ayer hacer terapia con un grupo resquebrajado. Les pidió un último esfuerzo para conseguir el objetivo de la permanencia en este tramo final de Liga. Parafraseando a Rafa Benítez: Nos queda un mes de aguantarnos", les dijo. Con el fin de intentar reconducir una situación (al menos momentáneamente) que tiene pinta de que podría terminar explotando antes de que termine la temporada. Y eso es lo que se quiere evitar.
Aunque se termine consiguiendo la permanencia, que realmente está al alcance de la mano, no esconderá el verdadero problema que hay en el vestuario con roces entre jugadores y también con el entrenador. Esto ya llegó hace tiempo a oídos del club que está preocupado por la situación.
"El vestuario no es el mismo de antes"
Una de las voces autorizadas del vestuario como es Juanfran comentó ayer en los micrófonos de Radio Valencia-Cadena SER que "el día del Depor nos hizo bastante daño por muchas cosas. Sobre todo porque pensábamos que habíamos perdido una buena oportunidad de volver a Europa. El vestuario ahora no está como hace dos o tres meses, pero eso lo marcan los resultados". El de Barona quiso quitar hierro al asunto asegurando que "no llega al punto de que los compañeros no se hablen", pero reconoció que "estas situaciones no nos gustan". Eso sí se mostró tranquilo asegurando que "ojalá estemos así todos los años, a 10 puntos del descenso faltando cinco jornadas".