Bermejo: "Si el Celta fuese el Madrid se pitarían los penaltis"

Mario Bermejo, delantero del Celta, calificó de "lamentable" la actuación del árbitro Gil Manzano en el partido contra el Mallorca y afirmó que éste pitaría penalti, en las dos jugadas dudosas en el área del conjunto balear, si su equipo, en vez de ser el Celta, "fuese el Real Madrid o el Barcelona".

"La actitud del árbitro desde el principio del partido no fue buena. Constantemente dejaba de pitarnos faltas a favor, cuando intentabas hablar con él te decía que no la había visto, pero sin embargo las de ellos siempre las veía. Dejó mucho que desear la actuación arbitral", ha asegurado Bermejo.

"Últimamente no quiero hablar de los árbitros porque es una función difícil, pero lo de ayer fue lamentable. La semana pasada también hubo algún penalti clarísimo contra el Rayo que tampoco nos pitaron y esto no puede ser".

Bermejo, además, cree que los árbitros españoles no tienen la misma "vara de medir" cuando están dirigiendo a un equipo de la zona baja de la clasificación o a uno de los "grandes" de la Liga BBVA. "Somos los colistas en estos momentos, estamos en descenso, pero no somos tontos y no nos vamos a quedar callados ni a admitir cualquier cosa. La actuación arbitral no fue como debería y estoy seguro de que si en vez de ser el Celta fuera el Real Madrid, el Barcelona o cualquier equipo grande, los penaltis se pitarían", ha denunciado.

No obstante, el atacante tampoco ha querido poner excusas a la mala clasificación de su equipo: "La situación no es la que es debido a los árbitros, eso está claro, pero por lo que respecta al partido de Mallorca nosotros estamos satisfechos con nuestra actitud y nuestro trabajo, pero muy dolidos por el resultado".

"Ha habido muchos partidos en los que no hemos tenido nada que hacer y hemos estado muy por debajo de nuestras posibilidades, pero sin embargo ayer el equipo estuvo muy bien plantado, estuvimos serios y fuimos lo que pretendemos ser: un bloque fuerte defensivamente, sobre todo fuera de casa que es donde más nos cuesta", ha recalcado.

Por último, Bermejo ha admitido que las opciones de permanencia son cada vez "menores", pero se ha mostrado "seguro" de que en el vestuario celeste nadie va a "bajar los brazos" a pesar de que el momento es "difícil" y "doloroso".

"Hablamos entre los compañeros y tienes ganas de meterte en casa y no salir. Pero esto se pasará mañana. El miércoles iremos a A Madroa, empezaremos a entrenar como cabrones e intentaremos darle la vuelta a esta situación, que pese a ser difícil no es límite", ha apuntado.

"Está en nuestras manos, estamos a cuatro puntos y quedan siete partidos en los que tenemos que morirnos. Estoy convencido de que lo vamos a hacer. La gente está dolida con nosotros, pero el lunes lo dimos todo en el campo para intentar ganar el partido", ha subrayado.