Está totalmente prohibido fallar en casa para agarrarse a Europa

Entrados en la recta final del campeonato cualquier error puede ser decisivo. Suele serlo, de hecho. De la misma manera que pase lo que pase siempre hay un clavo ardiendo al que agarrarse hasta que los números dicen lo contrario. Seguro que mañana Levante y Deportivo mantienen sus discursos mirando a Europa y a la salvación, pero la realidad será otra. Porque faltará una jornada menos en el calendario y las opciones, aunque intactas, serán menores.

Y eso que en Orriols siguen empeñados en no hablar de Europa. Algunos, claro. Los pesimistas que sólo miran hacia abajo y que ven como los 42 ó 43 puntos que, teóricamente, te dejan en Primera, se resisten. Partiendo de la base que este año casi seguro que se salvarán algunos con 37 ó 38, los que ven el vaso medio lleno saben que el octavo, el que marca la línea europea, está a cuatro puntos. Y eso no es nada. De ahí que cobre mayor importancia el Ciutat, donde no se puede escapar nada. Es decir, que si hoy el Deportivo sale vivo, mala señal. Para evitarlo JIM recupera la magia de Barkero. Palabras mayores. Y también a Navarro, lo que podría dejar al gran capitán Ballesteros en el banquillo.

El Deportivo desembarca en la capital del Turia en el mejor momento de la temporada... pero sin Riki. Algo contradictorio pues. Viendo cómo viene la jornada, es propicia para abandonar, por fin, el descenso casi una vuelta después. Aunque no tener a tu goleador siempre hace todo más cuesta arriba. Pero no puede ser tampoco una excusa. Oliveira tendrá su momento, quien sabe si de gloria para agarrarse a Primera División.