El Sabadell se lleva los tres puntos en un partido de locos

El Sabadell ha puesto fin a su caída libre con una sufrida victoria ante el Real Sporting de Gijón (4-3) -que llevaba tres victorias seguidas-, en un partido espectacular y apasionante, en el que ha habido de todo: siete goles, un penalti, una expulsión y emoción hasta el final.

El choque ha tenido un arranque fulgurante, ya que nada más sacar de centro, el Sabadell ha perforado la portería asturiana, con una jugada trenzada entre Manuel Lanzarote y el marroquí Moha por banda izquierda que ha culminado el delantero centro Aníbal Zurdo desde el interior del área (1-0).

El Sporting se ha visto por debajo en el marcador sin tocar ni un solo balón, circunstancia que le ha dejado totalmente descolocado, hasta el punto de no saber defender un córner en el minuto 8, cuando Abraham Paz marcaba de cabeza el 2-0, totalmente libre de marca.

El conjunto de José Ramón Sandoval acortaba diferencias (2-1) de falta directa ejecutada con potencia por el argentino Gastón Sangoy (min.29), pero los catalanes le han devuelto la moneda 6 después, con un golpe franco botado por Collantes, raso y ajustado al palo (3-1).

El encuentro ha enloquecido y el sportinguista David Rodríguez volvía a meter a su equipo en el partido al batir a Nauzet por bajo dentro del área y colocar el 3-2 al filo del descanso, que devolvía la emoción al choque, con miras a la segunda mitad.

Tras el descanso, nuevo arranque electrizante, con un claro penalti a los 3 minutos por agarrón de Borja a Aníbal dentro del área visitante, que Lanzarote ha transformado en el 4-2, firmando su gol número 14 de la temporada.

Pero la situación ha dado un nuevo vuelco en 5 minutos, por la expulsión del local Aníbal, con roja directa, por agresión al colombiano Bernardo y el tercer gol asturiano (4-3), cuando el croata Mate Bilic ha batido a Cecilio Nauzet en su desesperada salida.

La última media hora ha sido un monólogo del Sporting, con asedio a la portería sabadellense en busca del gol del empate que se le ha resistido, pese a disponer de claras ocasiones, especialmente por medio de un activo Sangoy y de los hombres de refresco Bilic, el senegalés Formose Mandy y Carlos Carmona, aunque el local Lanzarote tuvo la última, que mandó al palo.