FRANCIA - ESPAÑA
La crisis reduce los españoles a los Erasmus y los frikis
La Ciudad de la Luz se ha convertido en un destino que ya sólo está al alcance de los más pudientes o de los mejores estudiantes. O en el caso más extremo, en la mitad de los dos.
París ya no es lo que era. Se acabaron los tiempos en los que los pensionistas presumían de españolía ante los guías turísticos en los viajes del Imserso: "Sí, esto de los Campos Elíseos ya lo conocemos. Lo vemos todos los años cuando pasa por aquí un español en bicicleta con un maillot amarillo...". Ahora ya no vienen los jubilados a París. Será porque medio pollo con patatas vale cuarenta euros y un café dos con veinte. La crisis ha laminado estos viajes.
La Ciudad de la Luz se ha convertido en un destino que ya sólo está al alcance de los más pudientes o de los mejores estudiantes. O en el caso más extremo, en la mitad de los dos. Y a eso, a las pocas familias españolas que aún pueden pasar la Semana Santa en Eurodisney y a los Erasmus con más suerte de Europa (no es lo mismo estudiar en la Sorbona que en la universidad de Larnaca) se va a reducir la presencia española esta noche en Saint Denis.
A estos pocos y a los frikis, que no se pierden una. Manolo el del Bombo, patrocinado por la Federación, que se mueve por el lujosísimo hotel Le Bristol con un chándal rojo y unos zapatos amarillos. Tiene engrasados el hombro, el mazo del bombo y el bombo en sí mismo. Pepe el Monarca también está listo. Y constató que, efectivamente, Saint Denis es un patatal.
Con banderas y bufandas
Los aficionados españoles lucieron orgullosos desde ayer banderas y bufandas (excelentes para combatir el frío que hace en París, entre seis y un grado), con el lema "Vamos, España". Intentarán contrarrestar la manifiesta minoría en la que estarán hoy en Saint Denis.