Desautorizados seis extranjeros de La Masia a jugar en el Barça

Un serio problema mantiene en vilo a seis residentes de la Masía y a los responsables del fútbol base azulgrana. Desde hace semanas los abogados del club azulgrana trabajan a destajo para tratar de bloquear una sentencia de la FIFA que veta la participación de seis futbolistas que residen en el Centre de Formació Oriol Tort, después de que de manera anónima, el máximo organismo que regenta el fútbol recibiese dos denuncias que cortaron de raíz las evoluciones de estas promesas.

El francés Chendri (Cadete A); los coreanos Lee Seung Woo, Paik Seung-Ho y Jang Gyeolhee, del Cadete B; Adekanye y el camerunés Patrice Sousia, ambos del Infantil A, son los seis damnificados. Todos se ejercitan con sus equipos durante la semana y cumplen con lo que se les pide, pero deben conformarse, por el momento, en ver los partidos desde la grada.

El conflicto comenzó ya varias semanas, cuando desde los despachos de la Federació Catalana se informó al Barça que Lee Seung Woo no podía participar con el Cadete B. La denuncia se basaba en el artículo 19 y 19 bis, anexo 2 del Reglamento sobre el Estatuto de Transferencia de Jugadores FIFA. En ella se especifica que los traspasos a nivel internacional están prohibidos excepto en tres casos. El primero, cuando los padres cambian de residencia por motivos laborales no relacionados con el fútbol; el segundo, si la distancia del hogar del jugador a la frontera es superior a los 50 kilómetros; y el tercero, si el jugador tiene entre 16 y 18 años se podrá hacer sólo cuando el futuro futbolista sea residente en la Unión Europea.

Paciencia. Fuentes del club consultadas por AS aseguraron que lo único que deben tener es "paciencia" y que los chicos, pese a su corta edad, "están tranquilos" y con ganas de seguir ejercitándose a la espera de que se arregle todo este lío. De esta manera y pese a que todos tienen una proceso de adaptación excelente a nuestro fútbol saben que en este período deberán centrarse en aprender otras cosas y sacar conclusiones de la experiencia.

No se espera que de manera inmediata se solucione el problema, algo que los padres de las criaturas conocen de primera mano. Lo que les tranquiliza son los excelentes cuidados y la educación que reciben el la Masía, sitio en el que esperan volver a ver sonreír a los seis futbolistas víctimas de la burocracia y de una denuncia anónima.

De ser anterior, Messi no habría podido venir

Leo Messi llegó con 13 años a Barcelona y pese a que tuvo algún problema burocrático, el jugador pudo acabar de formarse en las inferiores del Barcelona. Sea como fuere, la Pulga podría haber tenido serios problemas para proseguir aquí su carrera, dado que no cumplía entonces ninguno de los tres requisitos que la FIFA demanda a los menores de edad. Jorge, padre de Messi, se quedó en Barcelona con él mientras estuvo aguardando saber qué pasaría con el futuro de su hijo. Cuando se supo que Leo se quedaría en el Barcelona, el club le ayudó a encontrar un trabajo, con el que su situación comenzó a ser más tranquilizadora. El tiempo ha jugado a favor de Messi, el mejor futbolista que nunca dio la Masía azulgrana.