Volcán en erupción en Pamplona

Será un volcán en erupción. El Reyno de Navarra acoge uno de los derbis más calientes en tiempo. No hay mejor acicate para la afición rojilla que recibir al 'enemigo' Athletic contra las cuerdas. Mendilibar y Bielsa llevan caminos diferentes. El primero ha enderezado el rumbo de su equipo con una dosis extra de testiculina y la calidad que con sus chispazos han aportado Kike Sola o el recuperado Masoud. En definitiva, diez puntos de los últimos doce. El Loco, cuyo puesto no correría peligro en principio salvo hecatombe, no endereza la nave sin cambiar el patrón. Aduriz no da para tapar todo. Tres derrotas seguidas y el agua al cuello.

En otro momento, ahora que luchan por el mismo objetivo, hasta un empate sería bueno para ambos, pero Osasuna buscará hacer sangre con el Athletic. Y los leones, ganar, porque el domingo llega el Valencia. Por si faltaba pimienta, entre Muniain y Cruchaga han cocinado una previa aún más excitante. Estaría bien que la grada recuerde que solo es un partido de fútbol.

Los rojillos tratarán de ahogar a Herrera e Iturraspe en medio campo. Para eso tienen a Lolo, Oier y el 'Gato' Silva, que araña pero también juega. El balón parado será trascendental. Hay tipos como San José, Aduriz, Flaño y Kike Sola, objetivo del Athletic para verano, que se mueven bien en esa faceta. Pero lo que más se va a medir es la portería. Osasuna tiene a uno de los mejores porteros de la Liga, Andrés Fernández. El Athletic ha tenido que recurrir de nuevo a Iraizoz después de que a Raúl no le entrase la camisa en el cuerpo ante la Real.

Aduriz dio el susto y dejó el campo cojeando

La última jugada del entrenamiento puso de los nervios a los aficionados que acudieron a Lezama -entre ellos un animoso grupo que tenía disfrazado a uno de ellos con el equipaje del Real Madrid pidiendo una oportunidad-. San José chocó con Aduriz en la disputa de un balón aéreo y la peor parte fue para el delantero, que fue al vestuario cojeando tras recibir un golpe en el muslo de la pierna derecha. En principio, el donostiarra estará en el once. De lo contrario, su puesto sería para Llorente, que afronta su último derbi como futbolista del Athletic. Ha hecho diana de manera consecutiva en los dos últimos viajes a El Sadar. Nunca ha sido muy bien tratado por la grada y es de esperar que este año, menos. Se escucharán cánticos repetidos por otras aficiones durante el curso. Bielsa le ha puesto las pilas esta semana y puede que tenga más minutos. El que lo verá desde casa es Amorebieta, fuera de la lista por la convocatoria de Ekiza.