SEVILLA 3 - DEPORTIVO 1
Medel se come al Deportivo
Doblete del chileno, que no dio opción a Fernando Vázquez en su estreno en el banquillo gallego. El tanto visitante lo hizo Kondogbia en propia puerta. Beto hizo un partidazo.
Muy poco duró el Deportivo de Fernando Vázquez en el Pizjuán. De la mano de un sorprendente Gary Medel, autor de dos goles, el Sevilla recuperó esta noche el crédito tirado en el Bernabéu y le recordó al conjunto gallego que mucho tiene que cambiar para seguir en Primera. Casi todo sucedió en unos primeros 45 minutos locos. A los cinco ya ganaba el Sevilla. La banda derecha de Coke y Navas fue un martillo pilón y por ahí llegó un centro que entre Rakitic, que cabeceó, y Medel, que la desvió sin querer con la mano, transformaron en el 1-0. El Depor sufrió golpes desde el pitido inicial. Ni siquiera era consciente de por dónde le llegaban. El balón era del Sevilla, que lanzaba ataques en plan estampida. En uno de esos Navas volvió a fallar un gol cantado y permitió a Aranzubía emular a Casillas con Perotti. Fue similar a esa jugada y a otra que el propio Navas falló ante Moyá en Getafe hace muy poco. Lo del palaciego es centrar y lo demostró sirviendo el 2-0 a Medel, que esta vez marcó queriendo, con la derecha.
El Sevilla insistió, casi por inercia, sobre la portería de Aranzubía, que paró bastante, más de lo que indica el marcador. Evaldo sufría con Coke y Navas. Silvio con Reyes y Alberto Moreno. Y Rakitic se comió solito a Bergantiños y Assunçao. El centro del campo tenía dueño absoluto. Pero el Depor sacó el orgullo. Ese arrebato da esperanzas, pese a todo. Tener alma es básico para afrontar un reto de la envergadura del que tiene el conjunto gallego. Y le dio para acortar distancias. Abel Aguilar tuvo fe tras un paradón de Beto a Riki y, ante el despiste supino de los centrales sevillistas, tuvo tiempo para volver a ponérsela al madrileño que no marcó porque Kondogbia se le adelantó y la coló en su propia portería. Fue un subidón moral para el Depor, que se lo creyó por un momento. Riki se encendió y, tras jugada personal, a punto estuvo de ponerla en la escuadra.
Pero fue ficticio. Tras el susto, el Sevilla recuperó el balón y Medel, que pisó más el área que en toda su vida, volvió a cazar una para empalmar y fusilar a Aranzubía. Hat-trick. Extraño, pero hat-trick del chileno. Esta vez el centro llegó desde la izquierda, de un Alberto Moreno al que Emery dio la titularidad pensando en la Copa, cuando tendrá que jugar por la sanción a Fernando Navarro. El 3-1 dejó contra las cuerdas al Depor, que en la segunda parte mejoró, sobre todo tras la salida de Valerón y Salomao. El Sevilla se confió y el amor propio deportivista amenazó con la machada del empate. Lo impidió Beto, con dos paradones a Salomao que lo catapultan del todo a la titularidad, se recupere o no Palop. Los de Fernando Vázquez reaccionaron tarde y faltos de la calidad suficiente como para sacar tajada de la relajación del Sevilla. Hoy puede estar a ocho de la salvación. Le queda trabajo por delante a Vázquez, pues cuando el partido estuvo realmente en disputa, el Depor nunca pudo con el rival. Un Sevilla que vuelve a la buena senda y ya piensa en la Copa, aunque en siete días tenga que jugar en el Camp Nou.