El Alcorcón impone su fútbol

El Alcorcón sumó una victoria importante en su intento de luchar por el ascenso a la Liga BBVA y lo hizo ante una UD Almería espesa, sin ideas, que, aunque se quedó cerca del gol, no logró batir a un seguro Manu Fernández.

La primera parte se la entregaron los rojiblancos al equipo de Bordalás y el gol de Nagore fortificó sus ideas de victoria. Los rojiblancos, por el contrario, fueron espesando su juego y perdiendo las opciones de superar a un rival cada vez mejor plantado, con más solidez defensiva y con mucho peligro a la contra.

Pudo empatar la UD en la segunda parte, pero la acumulación de atacantes tampoco dio resultado. Siempre se topó con un equipo paciente que no perdió la concentración y que acaba 2012 con buen sabor de boca, todo lo contrario que los almerienses.

Tal y como se esperaba, el propósito de la UD Almería de acabar con la racha de derrotas comenzó trabado. El Alcorcón, con mucho orden táctico, sin espacios, dejó el balón a los de Javi Gracia, pero no le dio opciones para moverlo con facilidad.

Por eso, las ocasiones no fueron rojiblancas. Salvo un balón, en el 8, de Carlos Calvo, al botar una falta, no hubo más peligro rojiblanco.

El Alcorcón, con su seriedad defensiva, robó el balón y buscó la contra. En la primera que tuvo puso el marcador a su favor y todo fue a pedir de boca para los de Bordalás.

La acción la firmó Nagore, pero le debió mucho a la velocidad de Juli, que fue el que robó y condujo hasta las cercanías del área para que el lateral alfarero la mandara a la escuadra.

El partido se le puso cuesta arriba a los rojiblancos. Perdidos, sin ideas, no hubo profundidad y el Alcorcón tuvo el segundo en el 14, pero la media vuelta de Miguélez, entre los defensas, se encontró con Esteban.

A partir de ahí, las contras del Alcorcón fueron controladas por un equipo almeriense que trató de buscar el gol por la banda de Raúl García. Un centro de éste, en el 18, lo remató Charles, pero Manu Fernández no permitió que fuera a mayores.

El último cuarto de hora fue sin fútbol, salvo una contra de Aleix Vidal que debió acabar con expulsión de Camille y que pudo terminar en gol.

En la segunda parte, a los rojiblancos les entraron las prisas. Gracia movió banquillo y antes del tercer cambio, con la entrada de Ulloa, Soriano pudo marcar en el 42 y se pidió un penalti por manos claras de Laguardia, que evitó que el remate de Mejía entrara en el marco alfarero.

El conjunto amarillo crecía cada vez más, se mostraba más seguro, y dejaba menos lugar para la duda, porque a la UD le faltaron ideas y al Alcorcón fortuna. En el 74, Babin pudo marcar, tras falta botada por Abraham, pero Esteban, en una gran estirada, evitó el tanto.

Acosó la UD en la recta final y, en el 86, pudo llegar el empate, poro el disparo de Aleix Vidal tuvo la perfecta respuesta de Manu Fernández, de nuevo, que impidió un final feliz para los locales.