CEUTA
El Fiscal pide 200 de multa por agresiones durante un partido
Además una indemnización de 90 euros al colegiado y de 30 euros al asistente, mientras que para el árbitro y su ayudante pide una indemnización del 210.
El Juzgado de Instrucción número 6 de Ceuta ha dejado hoy visto para sentencia un juicio por las denuncias cruzadas por agresiones entre un árbitro de fútbol y el presidente de un club, para los que el fiscal personado en la causa solicita sendas multas de doscientos euros.
El fiscal solicita al presidente una multa de 200 euros así como una indemnización de 90 euros al colegiado y de otros 30 euros al asistente arbitral, mientras que para el árbitro y su ayudante pide otras dos multas de 200 euros y una indemnización al dirigente del 210 euros.
Este juicio se ha celebrado después de que el presidente del Gimnasio Goyu Ryu de Ceuta, Mohamed Amar, y el árbitro Juan Pablo Ramos y uno de sus asistentes, Hicham Ahmed, se cruzaran unas denuncias por agresiones tras un partido de la Liga Nacional de Juveniles que se tuvo que suspender el pasado 1 de noviembre.
El colegiado y su asistente se han ratificado en los hechos que se reflejaron en el acta durante el partido entre el Goyu-Ryu y el Cádiz CF, que fue suspendido en el minuto 55 con 0-2 a favor de los visitantes ante la negativa del presidente del club ceutí a abandonar el terreno de juego.
Mohamed Amar accedió al campo para protestar al colegiado la consecución del segundo gol gaditano, al entender que había sido en fuera de juego, y al no abandonarlo el colegiado optó por suspender el encuentro.
Las agresiones, según el árbitro, se produjeron posteriormente en la caseta de los colegiados, a la que accedió el presidente del Goyu Ryu.
Juan Pablo Ramos ha relatado en la vista oral que le pidió al presidente que abandonara el vestuario y que éste le "insultó gravemente" y le "tiró una mesa encima" y le "cogió del cuello".
El árbitro asistente, por su parte, ha señalado que el presidente del Goyu Ryu le dio "un guantazo" cuando intentó separarlo de su compañero.
El presidente del Goyu Ryu, por su parte, ha negado los hechos y ha presentado también un parte médico en el que se constata que el colegiado le agredió con un bolígrafo y luego le dio una patada en la rodilla.