Liga BBVA | Granada 1 - Zaragoza 2
Víctor tumba al Granada
El triunfo da aire al Zaragoza. Mal partido rojiblanco
Lo de Víctor Rodríguez no ha sido llegar y besar el santo porque hasta Los Cármenes había demostrado muy buenas maneras. Pero su partido en Los Cármenes fue para grabar en video y guardarlo. Un gol, una asistencia y una participación en el juego decisiva para que su Zaragoza tome aire en la tabla y, de paso, meta en problemas al Granada de Anquela. Ese soñado nueve de nueve que buscaba el equipo rojiblanco se quedó en nada, porque entró dormido al partido y sólo se despertó cuando el equipo aragonés, ya cansado, dudó de si su favorable resultado corría peligro.
Y es que al avispado Zaragoza le bastó con dos picotazos certeros para sentenciar al Granada en una primera parte perfecta, ante un rival quizás afectado por no saber dónde jugará próximamente. Postiga, un nueve interesante para un equipo que dispute competición europea, volvió a demostrar que lleva el gol en la sangre con un cabezazo perfecto a los tres minutos. El portugués bien haría en agradecer el medido centro de Víctor Rodríguez, que se lució en Los Cármenes. El mediapunta del Zaragoza buscó después el sitio adecuado y el momento idóneo para hacer el 0-2, con otro gran pase de Abraham.
Fueron dos golpes muy duros para un Granada que aún se preguntaba si estaba en su estadio o en otro lugar. La presión del Zaragoza ahogaba la creación de un equipo que tiembla en defensa y que sin Brahimi aporta poco ingenio en ataque. Sólo las internadas veloces de Torje por la derecha llevaron las dudas al disciplinado bloque de Jiménez. Poca cosa, porque los números delataron al Granada en la primera parte: cero disparos a puerta. De ahí los pitos de la grada a sus jugadores. Esa vez no fueron para el alcalde.
Mejoría local. La entrada del héroe Ighalo revitalizó a los de Anquela, pero el Zaragoza siempre se encontró muy cómodo, hasta que las fuerzas flaquearon. También el Granada apretó en busca un milagro que no llegó por muy poco, y eso que la expulsión de Iriney, en una acción con Apoño, pudo acabar definitivamente con el encuentro. El Arabi, tras un centro de Orellana, volvió a marcar y ahí llegaron las dudas del Zaragoza.
Al ritmo de Apoño, el equipo de Jiménez fue reculando casi sin darse cuenta y estuvo a punto de tirar por la borda su buen trabajo. Primero en un despeje de 50 metros de Borja Gómez que despejó Roberto y luego con la jugada de Íñigo López, a la desesperada,, que no controló solo ante el meta visitante. El Zaragoza aguantó y Jiménez, ya en la grada tras su expulsión, volvió a sonreír. Anquela no se fue tan contento.