La Eurocopa espera a la Sub-21 salvo hecatombe

Al norte de Dinamarca, en la fría y lluviosa región de Jutlandia, la misma en la que España se proclamó campeón de Europa Sub-21 el pasado año, la generación inmediatamente posterior puede sellar su pase para la edición del próximo año en Israel. Sería como mantener abierto un círculo que no se cierra, un círculo que ya empezaron a dibujar De Gea, Mariño, Muniain y Montoya, los cuatro jugadores que estuvieron en aquel éxito de 2011 y que esperan repetir presencia dos años después.

Para lograrlo es preciso poner el broche de oro a una brillante clasificación esta noche en Aalborg, adonde España llega con un cómodo colchón tras el 5-0 logrado en la ida. Es ilusionante medir el nivel de esta fenomenal hornada. Comandada por De Gea, Isco y Muniain -a falta de los lesionados Thiago y Canales- y distinguida por tener a un delantero infatigable como Rodrigo, los de Lopetegui acarician un objetivo que les volvería a situar, al menos, entre los ocho mejores equipos del Continente.

En este último escollo no estará el ariete del Benfica, sancionado, por lo que su lugar en el once lo podría ocupar el getafense Álvaro Vázquez. Tampoco Marc Bartra, con un problema testicular, un contratiempo de ultima hora que hará que Nacho o Amat entren en el equipo en su puesto.

Sin esperanzas. Dinamarca, por el contrario, ha promocionado a uno de sus mejores hombres en la ida, Emil Larsen, a la absoluta. Dos discursos bien diferentes, dos mentalidades opuestas entre el que se sabe eliminado y el que debe defender su título europeo allá por donde pasa. Seguramente, en junio del próximo año, lo hará en Israel. Hoy lo sabremos en Dinamarca.