La preocupación del 'soci' es Song, a la espera de Piqué

Gerard Piqué dejó muestras evidentes de la mejora de su esguince de tobillo a primera hora de la mañana de ayer. El central descendió de su coche y se dirigió al vestuario caminando por su propio pie, ya sin muleta en la que apoyarse y sin aparentes síntomas de sufrimiento al apoyar el pie en el suelo. Por la tarde se ejercitó con el equipo.

Mientras se decide si el central catalán se infiltra para jugar o bien si está en condiciones para poder hacerlo sin un pinchazo que calme el dolor, la figura de Alex Song sigue generando muchas dudas entre los aficionados azulgrana. El soci tiene mucha confianza en el juego preciso del Barcelona. Pero esa sensación de seguridad en la línea de medios y ataque tiene una mancha en el colectivo. La lesión de Puyol, la duda de Piqué y las actuaciones de Song y Mascherano en los últimos partidos hacen que se recele de la improvisada pareja de centrocampistas situados ahora en el eje de la zaga y que viven en primera persona cómo la maldición de los centrales sigue atacando a los culés (Touré Yaya y Busquets, por ejemplo, ya tuvieron que variar su posición ante la ausencia de los titulares del momento).

Mientras Song genera dudas, el momento de Mascherano tampoco está al nivel de anteriores campañas. El jefecito, pese a todo, sigue teniendo mucho crédito, pero da la impresión de que le está costando un poco coger el punto necesario para poder seguir siendo considerado como imprescindible. Casualmente, Piqué y Mascherano fueron la pareja elegida por Vilanova para defender en el Bernabéu el 3-2 conseguido en la ida de la Supercopa el Camp Nou el pasado agosto. El Barça sufrió más de lo esperado y el equipo de Mourinho les pasó por encima en una media hora sublime.