"Si he llegado a jugador es gracias a Bordalás"

Llegó a Alcorcón en el último instante antes de cerrarse el mercado, ¿cómo fue su fichaje?

Había contactos con el club por mediación de Nico (director deportivo), Quique (vicepresidente) y el míster, que ya me conocia. Tenía claro que si salía del Rayo quería quedarme en Madrid. No me replanteé ni vi ofertas. Cuando se solucionó todo con el equipo vallecano, vine. Mi opcion era quedarme en el Rayo sí o sí, pero luego a última hora pasaron cosas raras y me despidieron.

Y aquí se reencontró con José Bordalás, que ya conocía de su etapa en el Alicante y en el Elche.

Son muchos años ya los que hace que nos conocemos y hemos mantenido la relación. Él fue el que me sacó. De estar trabajando de electricista y cobrar muy poco, a tener la oportunidad de ser profesional, meterme en Alicante en un piso y ayudarme. Tengo mucho que agradecerle. Él me dio la primera oportunidad. Si soy futbolista se lo debo a él.

Tras casi un mes, ¿el club era lo que se esperaba?

Me habían hablado muy bien del Alcorcón, pero no te das cuenta de la magnitud hasta que lo vives. Y se quedaron cortos. Es mucho más de lo que esperaba por la calidad humana de los que hay.

Y de momento, además, estás siendo importante en el equipo y ya llevas dos goles con el Alcorcón...

Hay que tener respeto a todos. Estoy jugando, pero hay otros que podrían hacerlo en mi lugar tanto en el banquillo como en la grada. Por respeto a esos compañeros, lo que no puedes hacer es pasearte por el campo. Estoy muy contento, aunque habrá algunos que no lo estén tanto, por desgracia. Es futbol, somos profesionales. Esta vez soy yo el que está jugando, pero también me he visto en la otra situación y por eso se valora mucho más cuando estás dentro.

Le hemos visto de mediapunta y de extremo, ¿dónde le gusta más jugar?

Me gusta muchísimo más la mediapunta, por detrás del delantero. Tengo más libertad. Pero para decidir está el míster y yo estoy para acatar si me toca en un puesto o en otro, o me tengo que quedar fuera. Somos muchos y hay que respetar al entrenador.

No es la primera vez que juega en Santo Domingo, pero de local es mucho mejor, ¿no?

El apoyo del público aquí es increíble. De local se vive con otra emoción. Nos gustaría ver el campo lleno, pero entendemos las circunstancias. Si damos a la afición lo que quiere será más fácil. Hay que ir contagiando a la gente.