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BARÇA

Cesc Fàbregas: "No puedo decir que sea un gran suplente"

"Me gusta jugar, tener minutos, como a todos, pero tampoco soy un mal compañero. En el fútbol no hay un buen suplente", dice el jugador del Barcelona.

Cesc Fàbregas: "No puedo decir que sea un gran suplente"
AFP

Cesc Fábregas ha reconocido que "en el fútbol no hay un buen suplente". Y subraya:"Yo no puedo decir que sea un gran suplente. Me gusta jugar, tener minutos, como a todos, pero tampoco soy un mal compañero. Deseo suerte a todos mis compañeros, pongo buenas caras y, si tengo que poner una mala cara, voy a casa y la pongo, no la voy a poner contra mis compañeros ni contra el entrenador".

"Estoy encantado en este equipo, cuando me diga el entrenador que tengo que salir saldré, pero no se lo voy a poner fácil ni mucho menos. Si sigo sin entrar, seguiré, seguiré y seguiré hasta que la cosa cambie. He venido aquí a intentar retirarme en el Barça", explica el jugador azulgrana en una entrevista en 'Intermedio' de Radio Marca.

"Siempre he dicho que estoy en el mejor equipo del mundo, vine aquí a competir, aprender, disfrutar, no a comerme la cabeza. El míster sabe lo que puedo ofrecer. En las tres posiciones en las que puedo jugar estoy compitiendo con los tres mejores del mundo, eso condiciona", matiza.

Y explica: "Me encuentro como nunca. Intento ser lo más compañero posible, tanto en los buenos como en los malos momentos. Estoy muy contento conmigo mismo y de poder jugar al fútbol, que es lo que me gusta. Me encuentro físicamente muy bien, he perdido 4 kilos. Antes de la Eurocopa ya empecé con una mini dieta y me fue muy bien, la he seguido y me encuentro físicamente muy bien".

Por último, ha negado que escuchara pitidos durante el partido ante el Valencia: "Sigo pensando que mi partido fue bueno, me encontré súper cómodo con Xavi, con Messi y con Song; me fui contento a casa. Por supuesto, tuve esa ocasión que me habría encantado que entrase, pero quiero ser positivo".

Luego, por la tarde, concedió una entrevista a TVE. "Estoy muy feliz. La única vez que no puedo estar feliz es cuando no tengo la pelota en los pies y cuando no me lo paso bien. Él siempre juega, juega todos los minutos, todos los partidos y la verdad es que en ese sentido, fuera del fútbol, no te puedo decir porque no sé nada y ojalá se le pase y vaya todo bien", dijo sobre Cristiano.

Sobre su suplencia en el Bernabéu fue claro: "Me sentía con ganas. Veía el partido y me intentaba ver un poquito a mí mismo y pensé que podía aportar algo."

Con la vuelta de Villa se mostró muy contento: "El hecho de no poder contar con él ha sido un hándicap sobre todo a la hora de meter goles, porque al fin y al cabo es el mejor y máximo goleador de la historia de la Selección y siempre lo queremos con nosotros."