Supercopa | Real Madrid - Barcelona
Gabriel, el niño sin pies que quiere ser Messi
El mes que viene conocerá a Leo, invitado por el Barcelona.
El fútbol, además de polémicas y rivalidades, trae consigo maravillosas historias de superación como la que sigue. Gabriel Ferreira es un niño brasileño de 11 años que, como otros muchos chavales de su edad, adora el fútbol. Sin embargo, no es como los otros niños. O sí, juzguen ustedes mismos.
Gabriel, debido a una malformación, nació sin pies. Pero ello no le impide hacer lo que más le gusta: marcar goles. Cuando el Barcelona supo de su caso no dudó un instante en invitarlo a participar en el FCB Campus que se celebró el pasado mes de julio en Río de Janeiro. A pesar de la malformación que sufre desde pequeño, Gabriel demostró que sus ganas de jugar al fútbol superan con creces su limitación física. Todos los técnicos y compañeros del campus quedaron boquiabiertos ante su especial habilidad para correr, saltar, chutar, regatear e incluso hacer bicicletas.
Gabriel, que recita de memoria la alineación del Barcelona, sueña con ser como Messi. De hecho, si le ven en los vídeos, su juego presenta ligeras similitudes con el del crack argentino; es rápido, habilidoso y ve puerta con facilidad. "Pese a no tener los dos pies, tiene una coordinación motora sensacional", explicó el fisiólogo del campus, Mauricio Soares. Hasta Deco, que visitó el campus -su hijo también participó- habló de Gabriel: "Su historia es emocionante. Toda la superación que demuestra, su adaptación, el placer de jugar... Joao ya me dijo que había un niño increíble que no tenía pies pero que jugaba de maravilla".
Invitado. La historia y, sobre todo, las habilidades de Gabriel han impresionado a la directiva del Barcelona, que lo ha invitado a venir el mes que viene a Barcelona para que pueda conocer a Messi, su ídolo.
A buen seguro que el crack argentino quedará boquiabierto cuando vea jugar a Gabriel, un niño que, con su historia, descubre al mundo que las limitaciones físicas de este tipo no son excusa para no cumplir sus sueños.