Jandro reeditó la historia

Jandro Castro volvió a marcar la diferencia en el Pedro Escartín y, tres meses después de exhibirse, el Girona ha ganado por 1-5 al Guadalajara. Con dos asistencias y un golazo, el centrocampista rojiblanco, de 33 años, volvió a desquiciar a los futbolistas morados. Cuando Jandro despertó a la media hora de juego, doblegó a su par, el medio centro Jony, y mandó en el campo de juego como un mariscal. Sin embargo, empezó achuchando el Deportivo Guadalajara, y se adelantó en el marcador. Antes de cumplirse los dos primeros minutos de juego, Zazo recibió en el área un pase largo de Espín. Su remate, flojo, fue detenido sin problemas por Mallo.

El primer disparo de los catalanes a la puerta defendida por Toño fue raso, lejano y sin peligro, obra de Garmendia, al filo del minuto diez. El Deportivo pegó primero. Y fue a balón parado. Gerard Badía botó un córner al segundo palo, donde apareció Jony para rematar franco el primer gol de los morados. El tanto espoleó a los locales que, ordenados en defensa, sacaron varias contras, lanzadas por Aitor y Susaeta, que sirvieron para contener a los rojiblancos en su campo. El Girona recurría a balones largos para tratar de alcanzar el área alcarreña.

Pero los hombres de Rubi lograron empatar. Un disparo lejano de David García tocaba en la pierna de Zazo. El balón hizo una parábola hasta el travesaño y el balón entró en la portería de Toño. Poco después, Aitor respondía con un gran zurdazo que salió lamiendo la escuadra derecha de la meta gerundense. Los morados perdían a Susaeta al filo del descanso, con molestias físicas evidentes, saltando al césped Alvaro Antón.

En la reanudación, el Girona salió con la idea clara de llevarse el partido. Jandro superó a Jony y centró a Juanlu quien, solo en el área, fusiló a Toño. Dos minutos después, Benja entraba en carrera por el centro de la zaga morada, de nuevo asistido por Jandro, y batía por bajo de nuevo al meta riojano. Dos goles en cuatro minutos que desbarataron las ilusiones locales y pusieron en evidencia el orden defensivo del Guadalajara.

Lejos de arrodillarse, los alcarreños se volcaron hacia la portería contraria. Alvaro chutaba desde la frontal, deteniendo Mallo con mucho mérito. Poco después, Aitor recibió un pase raso desde la línea de fondo, enviado por Badía, pero erró en el remate. Jandro se ocupó una vez más de apagar las esperanzas moradas. Con un elegante recorte dejó sentado a Jony y mandó la pelota al palo largo, donde Toño nunca podría llegar.

Aunque Terrazas sacó toda su artillería para tratar de maquillar el resultado. Ni Azkorra ni Cristian pudieron horadar la firme defensa catalana. El vasco tuvo una ocasión postrera, pero no consiguió rematar un balón que le cayó en los pies, junto al punto de penalti. El Girona sí remató la faena con un gol por la escuadra de Eloy, recién ingresado en el terreno de juego, ya con el tiempo cumplido. Aitor, muy voluntarioso todo el encuentro, disparó al palo en el descuento. A pesar de las importantes bajas que el Girona tenía para este partido, lo resolvió con contundencia, igual que en la campaña pasada.