El Valencia frena a un Real Madrid distraído

El campeón vivió su primer sobresalto nada más presentarse en sociedad. Un tropiezo ante el único rival que parece capacitado para seguir, siempre a cierta distancia, la estela que previsiblemente dejarán Real Madrid y Barcelona en su viaje por esta Liga reducida, si nada cambia, a una lucha entre dos. Esto acaba de empezar y pese a las sorpresas que salpicarán el desarrollo de la competición, todos adivinamos su más que probable desenlace.

Fue un duelo, el que dirimieron Madrid y Valencia, disputado a un ritmo bajo, disculpable en estos comienzos de temporada, y que facilitó las maniobras defensivas del Valencia y convirtió en más previsibles los ataques del Madrid.

Y eso que el Madrid se presentó en esta Liga como abandonó la pasada, ofreciendo una imagen poderosa y una pegada contundente. Apenas se habían recorrido diez minutos y el Madrid ya era dueño del marcador, mientras el Valencia todavía hacía esfuerzos por acomodarse en el campo. Un buen pase de Di María lo hizo aún mejor Higuaín, que después de ganar la espalda con facilidad a Víctor Ruiz y Ricardo Costa batió a Diego Alves, que exigió un doble remate del argentino para que éste pudiera celebrar el gol.

Con el mando en el marcador, el Madrid recuperó vicios añejos y se dejó de ir, aunque quizá no fuera otra cosa que ese exceso de confianza de quien se sabe superior y está acostumbrado a solucionar sus problemas sin esfuerzo y con goles. Es lo que tiene viajar por la Liga sin más oposición que su propia exigencia y la que le impone el Barcelona.

No logró demasiada fluidez el Madrid en su juego, con Xabi Alonso de nuevo como único referente válido en el centro del campo. La inesperada presencia de Lass no aportó más que la sorpresa inicial de verle entre los once elegidos por Mourinho para comenzar la Liga. Su aportación no tuvo mucho más recorrido.

Si Xabi buscó un socio en la creación siempre pudo recurrir a Di María, inspirado con esos pases que siempre supieron encontrar a Higuaín y que la defensa del Valencia fue incapaz de defender. Se vio distraído a Cristiano, menos participativo que de costumbre, y a Özil, al que no pareció estimular ni la previsible llegada de Modric. Tampoco el infalible Casillas estuvo en su papel y una mala salida, en la que se vio duramente golpeado por Pepe, permitió a Jonas empatar para el Valencia. El peor parado de ese choque fue el central portugués, obligado a quedarse en el vestuario en el descanso y que fue reemplazado por Albiol. Cumplió el internacional español.

Al Valencia no le disgustó ese ritmo bajo y cansino con el que se fue consumiendo el partido. Se sintió cómodo aguantando atrás, esperando una ocasión que nunca apareció y que cuando llegó la frenó Delgado Ferreiro, quien señaló un dudoso fuera de juego de Soldado cuando éste se disponía a encarar a Casillas. También tuvo su momento para reclamar el Madrid, quien pidió un penalti de Gago a Di María.

El Madrid terminó como tantas otras veces, agobiando al rival, que resistió en pie gracias a las manos de Diego Alves, y poniendo en el campo todos sus recursos ofensivos. Callejón, Cristiano, Özil, Higuaín y Benzema acabaron conviviendo sobre el césped, con Xabi Alonso como único mediocentro. Solución de urgencia o mensaje. Toda explicación vale.