Cuando la filosofía pesa más que cualquier nombre

El Betis se ha marcado una línea a seguir y no se va a desviar ni un ápice por motivo alguno. El asunto del frustrado fichaje de Nosa Igiebor, cuando era toda una prioridad, ha dejado bien a las claras la forma de actuar del Consejo. El jueves había quedado todo finiquitado para que el fichaje del africano. Los verdiblancos iban a pagar 1,2 millones de euros al Hapoel de Tel-Aviv y el jugador firmaría por tres temporadas a razón de unos 300.000 euros por cada una de ellas. Todo ok... hasta que Igiebor se desmarcó el viernes solicitando una ficha muy superior a la acordada verbalmente. El nigeriano pidió en torno a 150.000 euros más por año y firmar una campaña más. Y ahí se truncó todo porque el club se sintió engañado.

Tras llevarse el desengaño, el Betis no quiso negociar más e incluso se canceló el viaje de su agente a Alemania, que estaba previsto para mañana para finiquitar el contrato. Ya no hay opción de ficharlo y así lo explicó en su web: "El club contempla esta postura como una falta de respeto, seriedad y profesionalidad a la cual no va a acceder. La dirección deportiva apuesta por un perfil concreto de jugador donde la calidad técnica vaya en sintonía con las ganas, la ilusión, la ambición y el compromiso por vestir el escudo de las trece barras y el respeto por su gran afición. Esta ruptura unilateral del compromiso y el incremento solicitado por el jugador no van a ser atendidas por parte de la entidad".

Ahora, Stosic deberá volver a empezar, aunque Rubén Pérez cada vez convence más a Mel como compañero de Beñat en el centro y el fichaje puede ir más por un hombre más ofensivo, en lugar del esperado medio de contención.