Gianni Rivera
"Puse fin al mejor partido de la historia mundialista"
Hizo el último gol del que se considera el mejor Italia-Alemania de todos los tiempos:México 70'.
Echar un vistazo a la hemeroteca o repasar la historia sirve para ver que los italianos nunca perdieron ante los alemanes en un gran torneo.
Fútbol. Esa es la respuesta.
¿Sólo eso?
Podría haber algo más, pero no hay que darle más vueltas al asunto. Italia siempre fue un país muy competitivo, muy vivo en todos los aspectos. Siempre fuimos capaces de sacar lo mejor de cada uno de nosotros en las grandes ocasiones y ahí están los resultados.
¿Teme por una derrota cuando piensa que la historia puede cambiar?
Eso puede suceder y algún día pasará claro. La historia está para aprender y para mejorar algunos aspectos, pero lo que pasó, pasó y hasta ahora nunca pudieron con Italia.
Usted ganó una Eurocopa en 1968.
Cierto, aunque no nos medimos a los alemanes. En semifinales derrotamos a la Unión Soviética y en la final a Yugoslavia.
En cambio, dos años después, en México...
La famosa semifinal del Mundial. ¡Qué partido! ¡Qué locura! Ante más de 100.000 hinchas, a más de 30 grados en altitud y a las cuatro de la tarde.
Y con prórroga.
Eso, eso. Necesitamos un tiempo extra para dilucidar quién debía jugar el último partido ante los brasileños. Tras empatar a uno al final del partido, la prórroga fue de los partidos más intensos que nunca disputé. Hubo tensión, nervios y goles.
¡Cinco!
Cierto, aunque hay que recordar que los alemanes nos empataron en el 92'. El tanto lo hizo Schnellinger. El nuestro lo habría logrado Boninsegna en el 8'.
¿Qué le explicó a sus nietos de aquel tramo del choque?
Pues que sucedieron muchas cosas. Beckenbauer regresó al terreno de juego en cabestrillo, después de lastimarse el brazo. Pero eso no le prohibió seguir atacando desde atrás. Los alemanes siempre fueron fiables en su empuje. Müller anotó en el 94' y rápido igualó Burgnich, tras aprovecharse de un servicio de falta ejecutado por mí.
Estamos con empate a dos, quedan tres goles más y el tiempo sigue corriendo.
Cuando Riva hizo el 2-3 para nosotros en el 104', creía que la cosa se calmaría. Se trataba de contener el arreón alemán y me convencí de que el calor haría mella en ellos. Pero no fue así. De nuevo Müller igualaba el partido en el 110'.
Y usted, al minuto siguiente trasladó el mazazo a los alemanes. Gol del Bambino de oro.
(Sonríe). Tuve la fortuna de anotar y poner fin a la locura que estábamos viviendo.
¿Cómo recuerda ese gol?
Boninsegna desbordó por el perfil zurdo nada más sacar de centro. Vi que llegaba la pelota a mi altura y conecté de manera acertada. Aseguré con el interior del pie derecho y superé a Maier, que no daba crédito.
Y se acabó.
¿Le parece poco?
Con la intensidad que lo explica, uno quiere más.
Luego vino la final ante Brasil, aunque mejor que pasemos página. (La perdieron por 4-1).
Usted entró en aquella semifinal tras el descanso.
Relevé a Sandro Mazzola. Siempre creí que pese a jugar muy bien juntos, hubo detrás una decisión política.
¿Le está gustando el nivel de la Eurocopa?
Sí. Vimos grandes partidos.
¿Y piensa que del vencedor del Alemania-Italia puede salir el campeón?
Tendrá sus opciones, claro, pero entre España y Portugal también deberán analizarse muchas cosas.
En España se dice que el Balón de Oro se lo llevarán Cristiano o Messi por sus méritos durante la temporada...
Esas cosas siempre suceden y más ahora, con la cantidad de intereses que hay. Pero ese trofeo se da al mejor del año, no en el tramo de enero a julio.
A Messi y Cristiano, ¿se le puede sumar Pirlo?
Ustedes miran por los futbolistas que juegan en su país, mientras que en Italia consideran los expertos que Pirlo hizo una gran campaña con la Juventus y ahora está comandando a la selección nacional.
¿Con quién se queda?
Con el que lo gane. Hay mucha calidad en el fútbol actual. Muchísima calidad.