Cuartos | España - Francia
Francia: las 'banlieues' se apoderan de la selección
Laurent Blanc lidia con jugadores salidos de los estratos más bajos. El carácter de algunos componentes de la selección gala puede convertir el vestuario en un polvorín.
La selección de Francia es un conglomerado de jugadores salidos de los barrios periféricos de las grandes ciudades, los conocidos como banlieues. Laurent Blanc hace esfuerzos por integrar a todos ellos en armonía sabiendo los problemas que supone hacerlo con quien surgió de los estratos más bajos de la sociedad. Y el reto no es sencillo.
Le Monde y L'Equipe publicaron ayer una presunta discusión en el vestuario galo después del partido ante Suecia entre el técnico y Ben Arfa, que se quejó por haber sido sustituido. De lejos viene también la mala relación de Benzema y Nasri. Como también la de este último con Ribéry. Todos ellos crecieron jugando en los barrios periféricos de sus ciudades. Sin grandes lujos ni facilidades. Más bien lo contrario. Y esa infancia forjó un carácter que ahora amenaza con convertir el vestuario de los bleus en un polvorín.
Ejemplos. Hay casos de todo tipo. El portero suplente Mandanda y sus tres hermanos nacieron en el Congo, pero fue en Marsella donde sus padres se instalaron para poder salir adelante. Los del central Rami llegaron desde Marruecos a un barrio de las afueras de Bastia. Es más, el propio jugador del Valencia tuvo que trabajar en el servicio de limpieza de la ciudad de Frejús hasta que el fútbol le condujo por otro camino, ya cumplidos los 21 años.
Algo parecido a lo de Ribéry. Nada más obtener la mayoría de edad y antes de fichar por el Brest fue empleado, junto a su padre, de peón de obra. Ambos vivían en un modesto barrio de Boulogne sur Mer. Igual de discreto que la banlieue de Marsella en la que desarrolló su infancia Nasri, cuyos abuelos emigraron desde Argelia para instalarse allí. El padre era conductor de autobús, hasta que se convirtió en su agente, y la madre dejó de trabajar hace poco como empleada de hogar.
En la comuna de Villepinte, uno de los suburbios de París, nació Alou Diarra, de origen maliense. Cerca de allí lo hizo Ben Arfa, de padre tunecino empleado en una fábrica de fundición de metales. En las afueras de París se crió también Menez. Y en Bron, un barrio humilde de Lyon, vivió su infancia Benzema, hijo y nieto de argelinos. Un cóctel de lo más variopinto. Una mezcolanza de chicos de clase baja que Blanc maneja como puede. Intentarlo ya es un triunfo.