Roy Hodgson atrinchera a Inglaterra en su defensa

¿Recuerdan el amistoso que jugó Inglaterra en Wembley contra nuestra selección? Al acabar el encuentro, Xavi Hernández habló de la decepción que supone ver una selección con la historia y pedigrí de Inglaterra jugar en su propia área, ignorar la posesión, lanzar balones largos. Hay dos problemas sobre esa exposición: la historia reciente de Inglaterra le convierte, según la revista Times, en la nación más decepcionante del planeta y cualquier estilo que enmascara sus defectos vale. Segundo, la fuerza de Inglaterra desde hace al menos una década, y algunos dirán que más, es su estrategia defensiva. De hecho, sus últimas cinco victorias han sido por 1-0, incluida el partido contra España y los dos amistosos de Roy Hodgson contra Bélgica y Noruega.

El nuevo seleccionador ha reconocido ese valor y va a poner dos líneas defensivas de cuatro futbolistas, un mediapunta (Rooney tras sus dos partidos de suspensión, quizá Ashley Young hasta ese momento) y un delantero centro. No habrá mucho dinamismo o movimiento entre líneas. Será un juego sencillo, directo, físico. Insuficiente, dicen de momento los entendidos. Por primera vez quizá las expectativas son no sólo bajas (suelen serlo hasta el primer buen resultado), sino realistas.

Pero, el caso es que si se trata de defender, ¿por qué no se lleva a Rio Ferdinand y en su lugar, tras la lesión del titular Gary Cahill, llama a Martin Kelly que solo ha jugado 22 partidos de liga en toda su carrera, 12 el año pasado, y solo unos minutos con la selección? Por razones futbolísticas, dice Hodgson. Por razones políticas, contesta la mayoría. La relación de John Terry, acusado de insultos racistas hacia el hermano de Rio, y el central del Manchester United no iba a ayudar a hacer equipo, así que uno tenía que salir perdiendo.

Si Inglaterra llega lejos será porque no encaja goles y marca en las pocas ocasiones que crea, quizá demasiadas casualidades para este equipo cojo.