ELCHE 1 - NÀSTIC 0
El Elche no encuentra oposición del Nàstic
El Elche cerró, con un triunfo por la mínima ante el Nástic, la temporada en la que no ha cumplido el objetivo marcado por la entidad, que no era otro que, como mínimo, disputar la promoción de ascenso a Primera.
El Elche arrancó con cierta dosis de animosidad ante un Nàstic de Tarragona que, tirado muy atrás, ni estaba ni se le esperaba, con lo que los ilicitanos movían el balón de lado a lado sin oposición visitante.
El partido se trabó y el juego se volvió soso y anodino, lo que provocó que el poco público que se dio cita en el estadio ilicitano pitase su equipo, que, aunque llevaba la iniciativa, no llegaba a la portería de Pérez, que pasaba una plácida tarde primaveral.
Ambos equipos parecían haber firmado un pacto de no agresión y ni siquiera hubo jugadas que protestar a Melero López, que no necesitó amonestar a ninguno de los protagonistas. Sin embargo, Cristóbal, a los 37 minutos, le quitaría las telarañas al ángulo izquierdo de la portería visitante rompiendo la igualada inicial, al rematar un centro por la derecha de Jordi Xumetra.
Los equipos retomaron el partido con pocos alicientes, ya que mientras unos, los locales, querían y no podían, otros, los visitantes, mostraban muchas carencias en todas sus líneas, lo que hizo bostezar a la parroquia, aunque el Nàstic puso más empeño en agradar.
Nicki Bille despertó a los aficionados locales a los 70 minutos, pero, cuando lo tenía todo a favor para hacer el segundo tanto de su equipo, remató a las manos de Rubén Pérez, que tuvo que emplearse a fondo para detener, en la misma raya de gol, un remate de Etxeita a los 84 minutos.
Perico "redondeó" la tarde aciaga de su equipo al marrar una clara ocasión de gol con el tiempo prácticamente cumplido, pero su remate, tras una combinación entre Bille y Xumetra, salió ajustado al poste izquierdo de la meta visitante.