Negociación, traspasos o ERE: las cuentas no salen

El presupuesto que han elaborado los administradores concursales y el director general, Antonio Corino, para la próxima temporada no llega a los 10 millones de euros. De ellos, algo menos de cuatro están consignados para la confección de la primera plantilla, incluido técnicos. Pues bien, los siete jugadores con contrato en vigor para la próxima temporada que más cobran cuestan, solo ellos, casi un millón más.

De Toño (1,2 millones) a Christian (350.000), pasando por Torrejón, Cisma, Diop, Francis y Arana, sus contratos para la próxima campaña suman 4.720.000 euros. La decisión de los administradores es clara (y están dispuestos a ponerla en marcha de inmediato si no se entienden con el Consejo in pectore): deben sacarlos del equipo. Es tan sencillo como que no pueden pagarles.

El problema es que esa situación la conoce todo el fútbol español. Los jugadores, sus agentes y, por supuesto, el resto de los clubes, con lo que lograr ingresos vía traspasos se antoja muy complicado. La segunda opción es negociar una salida amistosa en la que alguno de los futbolistas acepte marcharse con la carta de libertad. La tercera, y menos deseada por que acarrea una indemnización, es la de incluirlos en el ERE que está sobre la mesa de los administradores.

Un caso especial, al que solo están dispuestos a sacar por la vía del traspaso es Pape Diop. En el club están convencidos que para él, por edad, rendimiento y cotización sí hay mercado. En caso de que ningún club pase por caja podría convertirse en la joya de la corona del proyecto de Segunda.

Con contrato en vigor y cifras por debajo de 200.000 euros quedarán Mario, Álvaro, Osmar, Gullón, Luque y Jairo. Junto a ellos son seguros en la primera plantilla Sotres y Quique Rivero. La duda ahora es saber que harán los 'hombres de Alí' a partir del 1 de julio.