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LIGA ADELANTE | DEPORTIVO 2 - HUESCA 1

El Depor vuelve a Primera tras su catarsis en Segunda

La victoria contra el Huesca, con goles de Riki y Xisco, devuelve al Deportivo a la Liga BBVA un año después de su descenso. Núñez había adelantado a los visitantes en Riazor.

P. BARGUEÑO
<b>DEPORTIVO 2 - HUESCA 1</b>.
DEPORTIVO 2 - HUESCA 1.Jesús Sancho

Hace casi un año Lendoiro prometió "no malvender" jugadores una vez consumado el descenso a Segunda. Adrián a parte, el presidente del Deportivo dejó casi intacta la columna vertebral del conjunto gallego, y muchos de esos hombres (Guardado, Riki, Lassad, Manuel Pablo, Aranzubia, Colotto...) consumaron el regreso del Deportivo de la Coruña a Primera División.

Todos estaban preparados en Riazor para celebrar el ascenso. Sobre todo la afición, que se metió en harina desde el minuto uno, igual que Bruno Gama, que tardó segundos en mandar el primer aviso en forma de centro al que no llegó Riki, punta de lanza junto a Lassad. El Huesca, con la satisfacción del trabajo bien hecho -no se jugaba nada esta tarde-, pareció en un primer momento que se iba a dejar llevar: cerrado atrás, sin nervio de medio campo hacia arriba y con un ritmo algo mortecino.

Guardado asumió galones desde muy pronto en la labor de creación de peligro, pero fue Riki, a pase del portugués Gama quien en el minuto siete tuvo la primera clara del Depor. Y sólo dos minutos después el que no acertó a rematar fue el luso tras una eléctrica incursión de Lassad por la banda izquierda.

El Deportivo veía cada vez más cerca el gol al tanto que el Huesca iba bajando la presión y parecía dispuesto a entregar armas: los coruñeses eran dueños y señores del fortín de Riazor. Guardado puso a prueba a Luis García en el minuto 18 desde el pico derecho del área con un disparo que el meta del Huesca mando a córner.

El partido parecía encauzado para los de Oltra: un rival sin nada que perder ni ganar, algo blandito, con voluntad de jugar el balón y escasísimo punch de cara a portería... Pero apareció la ansiedad. Fue una sombra maldita, un leve atisbo, pero ensombreció Riazor durante un cuarto de hora y fue el preludio del tanto oscense. En el minuto 33, Núñez, que estaba siendo el mejor de los visitantes, salió victorioso de dos encontronazos con la defensa del Deportivo y se plantó sólo ante Aranzubia, al que batió con frialdad.

El tanto del Huesca dejó en paños menores al Deportivo. Y vaya si pasó frío. Fueron sólo unos minutos, pero los suficientes para que los de Quique Hernández pudieran anotar el segundo. Lo perdonó Núñez en el minuto 35, tras una buena contra ejecutada por Jorge Larena. El extremo madrileño perdonó ante Aranzubia en el mano a mano. Y dos minutos después, el propio Larena cerró los minutos de dominio del Huesca con un disparo desde fuera del área.

Para el Depor no quedaba otra que la remontada. La primera piedra la puso Morel, que en su única aproximación con peligro de la primera mitad por la izquierda puso un peligrosísimo centro que acabó convirtiendo en gol Luis Helguera en propia puerta ante el acoso de Riki (minuto 40). El empate quitaba algo de amargor de las gargantas coruñesas y dibuja un nuevo horizonte para la segunda mitad.

Los 45 minutos finales comenzaron bien para el Depor, con dos buenas aproximaciones de Riki al inicio. Volcado en su afán por consumar el ascenso, los locales salieron a por todas, hasta tal punto que descuidaron su defensa y Omar estuvo apunto de adelantar de nuevo al Huesca tras un buen recorte a Manuel Pablo y un durísimo disparo que rozó la escuadra derecha de Aranzubia (minuto 55).

Hasta ahí llegó el Huesca, porque el Deportivo decidió romper el hielo definitivamente para dar paso a la consiguiente avalancha. Fue un alud de ocasiones y emociones lo que se vivió en Riazor en la última media hora del conjunto coruñés en Segunda. Riki, Lassad, Bruno Gama... todos percutieron con obstinación sobre la meta de Luis García, pero sin lograr romper del todo el cerco.

En el minuto 67, Xisco entró en el terreno de juego en lugar de Lassad. Su último gol en Tarragona, a la postre decisivo para el triunfo coruñés, estaba todavía muy vivo en las pupilas deportivistas... a las que aún les quedaba un último esfuerzo, tenían que dilatarse todavía mucho más para fijar en las retinas el gol de Xisco. Fue él, con la complicidad de un incansable Bruno Gama, autor del pase, quien devolvió al Deportivo de la Coruña a Primera División con un soberbio tanto de cabeza (minuto 70).

Probablemente le haya venido bien al Depor un año en Segunda, una categoría-reformatorio para los gallegos, que durante sus últimas temporadas en Primera se encontraban como un dinosaurio esperando, impávido, la llegada del deshielo. Han alcanzado los 88 puntos, récord de puntuación de Segunda de todos los tiempos junto con el Valladolid 2006-07, y han vuelto a convertir Riazor en un escenario mágico.