El Celta no falla y traslada la presión al Valladolid

El Celta de Vigo continúa firme en su camino hacia Primera División después de sumar su quinto triunfo consecutivo ante un inocente Alcoyano (4-0), lo que deja al conjunto dirigido por Luis César Sampedro al borde del descenso a Segunda B.

A diferencia de lo que le sucedió la pasada temporada, cuando perdió el ascenso en el tramo decisivo de la Liga, el equipo de Paco Herrera ha llegado muy fuerte a las últimas jornadas.

Al Alcoyano lo ventiló por la vía rápida, favorecido por el tempranero tanto de Alex López al minuto de juego.

El Celta ha recuperado las señas de identidad que lo convirtieron en un equipo temible hace unos meses: solidez defensiva y mucha pegada en ataque. Sobrepasado el ecuador de la primera parte, Iago Aspas, tras un pase en profundidad de Bermejo, batió a Dorronsoro en el mano a mano.

Con el dos a cero, el Celta bajó una marcha y su rival empezó a tener más el balón. Al conjunto vigués no le importó demasiado. Se encuentra cómodo defendiendo y contragolpeando, es una de sus armas.

En el minuto 50, Quique de Lucas pudo sentenciar pero falló ante el meta alicantino.

Ese fue el guión en la segunda parte. El Alcoyano dominaba, mientras el Celta seguía creando, con rápidas transiciones, mucho peligro.

Joan Tomás, que acababa de entrar en el terreno de juego, volvía a desaprovechar una gran oportunidad al estrellar su remate contra la red lateral.

Y pudo pagarlo su equipo, ya que en el minuto 71 Antonio Cañadas rozó el tanto con un lanzamiento de falta directa que puso en apuros a Sergio. Pero dos minutos después, tras otro nuevo contraataque, Alex López redondeó su gran actuación. Orellana cerró la goleada con el cuarto poco después.

El Celta traslada ahora la presión al Valladolid, que no puede fallar mañana ante el Sabadell en su estadio si quiere seguir aspirando al ascenso directo. Se espera una guerra intensa entre ambos por la segunda plaza.