Liga Adelante | Villarreal B
Roig exigió al filial que gane todos los partidos
Ya se impuso al Huesca para evitar toda sospecha.
El pasado domingo, el Villarreal certificó su descenso a Segunda, lo que a su vez significó que el filial de la categoría de plata bajaba a Segunda B de forma automática. Los chavales del equipo amarillo conocieron su triste destino al bajar del avión que les traía de ganar en Xerez. Lágrimas e incredulidad dentro de un grupo de jóvenes valores que sí habían logrado su objetivo de la permanencia. Sin comerlo ni beberlo, el proyecto de Fernando Roig se caía a pedazos.
Sin embargo, lejos de bajar los brazos o resignarse, el mandatario amarillo acudió al día siguiente al vestuario del Villarreal B. Encerrado allí con los jugadores, les dijo a que estaba muy agradecido por su esfuerzo y que le dolía este descenso, igual que el del primer equipo. Así que les pidió dos cosas y les aseguró otra. Les pidió honradez, esa que parece se les ha olvidado a muchos equipos en estas últimas jornadas. Además, les exigió que ganen los partidos que quedan hasta el final de temporada. Y ya lo hicieron el pasado miércoles con el Huesca y esperan repetir ante Recreativo y Cartagena, que luchan por salvarse, y con el Deportivo, que ya estará casi en Primera.
Por otro lado, Roig les pidió no perder la ilusión, ya que, con ella, una gran parte de esos jugadores van a llegar al primer equipo para luchar por el ascenso a la máxima categoría. Mientras, los restantes jugadores de la plantilla van a tener que pelear el curso que viene en Segunda B por volver a la Segunda cuanto antes.
La reacción de vestuario fue inmediata y el goleador Joselu, uno de los que ya lleva muchos años de amarillo, aseguró: "Lo que ha pasado en el club es un palo, pero formamos una gran familia y vamos a volver a dejar las cosas como estaban".
Por último, el presidente les aseguró que, a pesar de los lógicos recortes provocados por el descenso, el único capítulo que mantendrá el mismo presupuesto será el de la cantera.