"Fue un honor estar aquí tres temporadas"

Alberto Rivera dio sensación de despedirse, aunque aún no recibió ninguna comunicación del club en la que se le agradezcan los servicios y se le indique que no se le ofrecerá la renovación del contrato que concluye en junio.

Sin embargo, la postura de Rivera no es de decepción con el Consejo, sino "todo lo contrario, porque me dio la oportunidad de estar aquí tres años maravillosos" y asume que en el fútbol "cambia todo de un mes para otro y los resultados influyen mucho". El manchego subrayó que "estoy muy agradecido y fue un honor estar aquí tres temporadas". Al no tener ninguna noticia del club, Rivera aprovechó su última rueda de prensa para "despedirme, por si no tengo la ocasión más adelante". El rojiblanco admite que "el club tiene sus ideas, tiene que planificar la próxima temporada y entiendo que soy un jugador con edad, pero lo único que me duele es no haber podido mantener la categoría".

Él asume que "el final de temporada se lleva mal, porque ya no sirve de nada pensar en lo que podías haber hecho y que se podía estar mejor" y asume que "no se hicieron las cosas bien, lo que debe servir para el futuro". Asimismo, Rivera apuntó que "estas cosas sirven para hacer madurar, hacer crecer a los jugadores y al club y para aprender".

En un balance de la última temporada, Rivera señaló que "tuvo el inconveniente de que no ganamos en los primeros siete partidos, que son muchos, y a partir de ahí lo arrastras".

"Es de las mejores aficiones de Primera y lo será en Seguda"

Alberto Rivera indicó que la clave para regresar a Primera División "es la unión, que fue uno de los argumento por los que el equipo se mantuvo en las temporadas anteriores, porque el club, los jugadores y la afición tiraban en la misma dirección". El jugador manchego señaló que "el Sporting tiene una de las mejores aficiones de Primera y seguro que también lo seguirá siendo en Segunda, para que sea un jugador más a la hora de ascender", objetivo que confía en que se va a lograr "el año que viene con los jugadores que hay". El centrocampista de Puertollano siempre tuvo presente "el cariño que me dispensó la afición, sé que dejo buenos amigos y me siento apreciado, lo que es una razón más para sentirme peor por la situación del equipo tras acabar la temporada".