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El Real Zaragoza sale del concurso de acreedores
El Real Zaragoza hizo ayer oficial su salida del concurso de acreedores, después de que la juez Villellas aprobara el miércoles la Propuesta de Convenio Anticipado presentada el pasado 15 de diciembre, que recoge una quita del 50% del pasivo ordinario y una espera de ocho años, con uno de cadencia.
El mismo día en que se cumplían 17 años de la conquista de la Recopa en el Parque de los Príncipes de París, el Real Zaragoza anunció su salida, once meses después, del concurso de acreedores, una vez que la juez María del Carmen Villellas, titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de la capital aragonesa, firmara el miércoles el auto en el que se aprueba la Propuesta Anticipada de Convenio (PAC) que el club había presentado el pasado 15 de diciembre con una quita del 50% del pasivo ordinario y una espera de ocho años, con uno de cadencia. De esta forma, la deuda del Real Zaragoza pasa de 145 a 92,5 millones de euros y Agapito Iglesias recupera la administración efectiva de la sociedad anónima deportiva, cesando los tres administradores judiciales, Andrés Jiménez, Carlos Terreu y Jorge Aso.
Esta sentencia pone fin a un complicado proceso que ha requerido de la adhesión de más del 50% del pasivo ordinario -en concreto el 53%- y que ha debido esperar casi cinco meses desde la presentación de la PAC a la resolución de los diversos recursos particulares presentados por aquellos acreedores disconformes con el informe presentado en primera instancia por la administración concursal.
La deuda del Real Zaragoza ascendía a 145 millones de euros -con hasta 375 acreedores- de los que aproximadamente 50 millones de euros no tienen privilegios especiales, es decir, que no entran en la quita y tienen un convenio especial de pago, como es el caso de los 14 millones que se deben a las entidades financieras aragonesas o los 36 millones que se adeudan a la Agencia Tributaria y que se deberán abonar en ocho años, a 4,5 por ejercicio.
Calendario de pagos. Los 68 millones restantes son créditos ordinarios a los que sí que se ha aplicado la quita del 50% y que han quedado en 34, habiéndose establecido un calendario de pagos de ocho años, con uno de cadencia, lo que supone que el Real Zaragoza deberá hacer frente a partir de la temporada 2013-14 a 4,25 millones anuales, a los que se deben sumar los 4,5 de Hacienda y los casi dos del convenio especial con las entidades financieras. En total, el Real Zaragoza tendrá que abonar 10 millones de euros por campaña hasta la finalización de la 2020-21. Todo este calendario de pagos se ampliaría a doce ejercicios si el Zaragoza descendiera a Segunda, con los tres primeros de cadencia.
Además, dentro del montante global de la deuda existían diversos créditos subordinados (de personas vinculadas o relacionadas con el accionista mayoritario o con el órgano de administración) que ascendían a 27 millones de euros, a los que también se ha aplicado la quita del 50%. Pero los ocho años de pago empiezan a contar cuando finalicen los ocho primeros. Es decir, que el club le pagará a Agapito Iglesias 13,5 millones de euros de sus créditos participativos entre la temporada 2021-22 y la 2028-29.
De este modo, el Real Zaragoza finaliza en menos de un año, y con un éxito sin precedentes, un delicadísimo proceso que ha evitado su desaparición, al tratarse del concurso de acreedores de mayor cuantía de todo el fútbol español. Sin embargo, a partir de ahora cualquier incumplimiento en el calendario de pagos puede llevar a un acreedor a instar a un juez la disolución de la sociedad anónima deportiva.