"Llegamos vivos cuando estábamos desahuciados"

El entrenador del Real Zaragoza, Manolo Jiménez, ha recalcado que a pesar de que su equipo no depende en su partido contra el Getafe de otros resultados para lograr la permanencia "la realidad" dice que tienen que "sumar los tres puntos".

"La razón prioritaria para creer en la permanencia es que hemos llegado a la última jornada vivos cuando en diciembre estábamos desahuciados", ha manifestado en la última comparecencia en La Romareda antes de viajar a Getafe.

Durante la semana ha tenido que trabajar, según él, "metiendo presión a los jugadores y bajando el nivel de exigencia" en una labor de psicólogo para que "el colectivo tenga claro el objetivo final". Jiménez, que ha reconocido tener "los nervios" de su época de futbolista conforme se acerca el día del decisivo partido, confía en que "la tensión" que tienen sus hombres "es buena si no se convierte en ansiedad".

"Tras el triunfo ante el Racing y que los resultados nos favorecieron, los primeros días fueron eufóricos, pero conforme pasan los días y se acerca el partido la tensión se apodera", ha admitido. El de Arahal se ha mostrado convencido de que su equipo conseguirá sacar el partido, aunque ha recordado que para lograrlo tienen que "mostrar la mejor versión" con la que son "capaces de ganar. "Pero si no la mostramos tendremos problemas", ha advertido.

En la convocatoria para este partido ha incluido a todos los componentes de la plantilla, incluido el sancionado Mauricio Lanzaro y el lesionado Carlos Aranda, además de los cuatro jugadores del filial, por lo que hasta Getafe viajarán un total de veinticinco jugadores. Al respecto de la presencia del delantero Carlos Aranda, el único jugador con problemas físicos, ha señalado que salvo una mejoría inesperada en las últimas horas cree que "difícilmente va a llegar". "No estoy jugando al despiste es que dudo que entre", ha señalado.

Ante el equipo de Luis García piensa mantener la misma línea de la fase final de la competición. "Es el camino -ha dicho- que nos ha llevado a la última y gran final, con nuestros defectos que los tenemos y nuestras virtudes, pero hay que recordar que hemos recortado 18 puntos al Rayo Vallecano, que soñaba con meterse en Europa".

Jiménez no quiere que su equipo juegue solo "con el corazón que te puede llevar a perder la cabeza". "No podemos tirar el partido en el primer minuto ni darlo por ganado. Tenemos que ganar en 90 minutos más el descuento", ha recalcado. Para conseguir el objetivo ha insistido en que deberán "tener cabeza y madurar" porque se enfrentarán a un rival que "no tendrá prisas y querrá ganar, aunque no determinará su clasificación, en un partido en el que conforme pasen los minutos más se irá incrementando esa ansiedad que no debe aparecer".

"El equipo está muy bien físicamente, estratégicamente y tácticamente, pero ahora hay que llegar con la templanza suficiente para desarrollar todo lo bueno que tiene y plasmarlo en el último partido", ha analizado. Jiménez ha señalado que en este encuentro si realiza algún cambio será en función "del cansancio" en el que la charla previa al partido será decisiva para conocer el estado anímico que será "determinante".