Liga BBVA | Mallorca 1 - Rayo 0
El Mallorca ganó y dejó al Rayo al borde del abismo
Tamudo se topó con el palo y Ayza no vio un penalti a Costa
Un gol de Chory Castro, la gran actuación de Aouate y la mala puntería del Rayo en las ocasiones de que dispuso dieron la victoria al Mallorca y alimentan la esperanza del equipo bermellón de conseguir una plaza europea. Y eso que en algunos momentos pareció que la necesidad apretaba más que la ilusión, que la inquietud del conjunto vallecano por su proximidad a la zona de descenso podría superar el sueño continental que alberga el Mallorca. Pero sólo fue un espejismo. El Rayo amagó y el Mallorca sí que supo golpear.
El aviso inicial de Michu de que el cuadro franjirrojo estaba decidido a ganar el partido, lo ratificó Tamudo cuando se quedó solo ante Aouate. El delantero, sin embargo, se topó con el poste izquierdo de la meta del israelí cuando lo tenía todo a favor para marcar.
El portero del Mallorca se erigió en el salvador de su equipo en tres minutos. Primero lo hizo en el 34, al neutralizar una doble oportunidad rayista, Tamudo y Diego Castro encontraron al hebreo en lugar del camino del gol. En el 37, al detener un disparo lateral de Labaka.
El cuadro de Caparrós apenas había inquietado hasta entonces a Cobeño, ni siquiera en los escarceos iniciales, cuando la balanza de la posesión del balón aún no se había inclinado del lado rayista. Pero Chory Castro dio signo de que el Mallorca seguía vivo también en ataque al borde del descanso.
El guión cambió radicalmente en la segunda parte. El cuadro bermellón comenzó a crear peligro desde el comienzo. Alfaro y Castro pusieron a prueba a Cobeño. El uruguayo culminó el despertar balear con una jugada en la que robó la cartera a Arribas y batió el meta madrileño con la pierna izquierda.
Entonces entregó el balón al Rayo y probó suerte con el contragolpe. La fortuna también se alió con él cuando Ayza Gámez no sancionó con penalti una clara obstrucción de Chico a Diego Costa. El Mallorca sigue soñando con Europa y el Rayo se queda al borde del abismo.