Liga BBVA | Granada 2 - Espanyol 1
Tenía que ser Ighalo
El Granada estará salvado si el Zaragoza no gana hoy
Ighalo es un jugador que, más allá de sus peculiares formas de entender el quehacer de un delantero, ya tiene reservado en el la historia del Granada un hueco para la eternidad. El nigeriano, notario del regreso del Granada a Primera División con aquel gol antológico en Elche, se convirtió ayer en el héroe de Los Cármenes versión 2.0. Sus dos goles en media hora al Espanyol otorgan más de media salvación al conjunto andaluz (puede ser entera si el Zaragoza no gana hoy, tras la derrota del Sporting ayer). Abel decidió que fuera el nigeriano quien asumiera galones en ataque, reservando a Uche para una segunda parte igual de importante pero mucho menos vistosa y agradable. En parte por el Espanyol, que dejó para otro día eso de reivindicarse como equipo competitivo cuando está en tierra de nadie. Tendrá que ser otro día, a pesar del zurdazo de Didac, único testimonio del comparecimiento perico en el partido y que valió un 2-1 testimonial tras los dos goles de Ighalo.
Y es que desde el principio no supieron qué hacer los de Pochettino ante el empuje del Granada. Los de Abel salieron a morder, sin dejar pensar a los blanquiazules y con una velocidad más que los pericos a la hora de mirar a la portería. Todo ello lo transformó Ighalo en fútbol, es decir, en resultado. El delantero cazó un centro forzado de Jara y con un espectacular taconazo se deshizo de los dos centrales del Espanyol para después batir de tiro cruzado a un impotente Christian. Golazo. Clase. El 1-0 soltó al Granada, que buscó sangre. El Espanyol, con una pasividad impropia de quien reclama honor, se dejaba engatusar por un Granada con hambre. El hambre, en particular, de Ighalo. Ese delantero extraño que unas veces desespera a la grada y otras enamora a La Alhambra. Ayer tocaba cortejar al mejor monumento de España y tras la delicatessen del 1-0 cazó otro balón perdido en el área chica, tras infructuoso remate de Mikel Rico, para empujar el 2-0.
De Primera.
"Es de Primera, Granada es de Primera". Así gritaban al viento los casi 22.000 espectadores que hacía retumbar Los Cármenes. No es para menos, mucho tendría que pasar para que el sueño de toda una ciudad no se vea cumplido por tercera campaña consecutiva. Impresionante el devenir del Granada en los últimos años. El Espanyol, por su parte, no viajará por Europa. Ninguna catástrofe. Tiene aún dos partidos para esa reivindicación de orgullo que prometieron. Quizás todo sea culpa de Ighalo...