Liga BBVA | Real Betis 2 - Atlético de Madrid 2
El tren de la Champions se aleja del Manzanares
El Atlético tuvo la victoria en su mano, pero sesteó en el tramo final y el Betis remontó en tres minutos. Falcao salvó un punto en el descuento. Antes marcaron Koke, Pozuelo y Pereira.
El Atlético de Madrid dio su brazo a torcer y ve muy mermadas sus opciones de disputar la próxima edición de la Liga de Campeones tras el empate a dos goles cosechado en el Benito Villamarín ante el Betis. Los de Simeone merecieron la victoria tanto por juego como por ocasiones ante un rival blando y contemplativo, pero se durmieron y permitieron que el Betis le diera la vuelta al partido en tan sólo tres minutos, los que fueron del 86 al 89. Los rojiblancos, con más empuje y ganas, se adelantaron con un gol de Koke ya en la segunda mitad. Dos acciones puntuales permitieron de forma inexplicable que los de Mel remontaran en el tramo final con tantos de Pozuelo y Pereira. Como mal menor, un Atlético que se mantenía en pie a duras penas logró salvar un punto en el descuento con un cabezazo de Falcao.
A pesar de no hacerse con el dominio de forma clara desde el principio, el Atlético de Madrid saltó al césped del Benito Villamarín decidido a mandar y a llevar la iniciativa. En el tramo inicial del choque el equipo de Simeone superó en verticalidad, en ganas y en oficio a un Betis más pasivo y que se estampó una y otra vez con la firme y efectiva zaga rojiblanca. A pesar de su ímpetu, el equipo madrileño lo intentó sólo con disparos lejanos y desviados que no pusieron en apuros a Fabricio. Hubo que esperar hasta el primer cuarto de hora para que los colchoneros pusieran un nudo en la garganta de la parroquia local con un pase atrás de Salvio que se paseó por el área verdiblanca sin encontrar rematador.
A medida que avanzaba el crono, el Atlético de Madrid logró casi monopolizar la posesión del balón ante un Betis muy contemplativo que dio un paso atrás, cediendo todo el protagonismo a su oponente. Aún así, la falta de tensión y de movilidad del esférico por parte de ambos conjuntos desembocó en un encuentro muy previsible con dos equipos muy ordenados y que optaron por economizar esfuerzos. Fue precisamente Salvio, ausente el pasado jueves en Mestalla, el jugador que se mostró más incisivo en el ataque de los del Manzanares que contó, una vez más, con Falcao como principal referencia. A falta de diez minutos para el descanso Gabi lo intentó con un disparo lejano que se marchó por poco por encima del larguero bético.
Una buena jugada individual de Rubén Castro en los instantes finales de la primera mitad y que acabó siendo despejada por la defensa visitante fue el único y pobre bagaje ofensivo de los de Pepe Mel en los primeros cuarenta y cinco minutos. Cuando el primer acto tocaba a su fin, Adrián logró perforar la portería de Fabricio, pero Teixeira Vitienes II y su asistente estuvieron atentos para anular el tanto por posición de fuera de juego del delantero asturiano que sí existió. Acto seguido, el siete rojiblanco obligó a emplearse a fondo al meta del equipo sevillano con un potente disparo desde dentro del área que este acertó a despejar con el pie cuando ya estaba totalmente vencido.
Con la sustitución de Beñat por Matilla echó a andar una segunda mitad que comenzó sin variación alguna en la tónica del encuentro. El Atlético volvió a tomar la iniciativa con una mayor posesión de la pelota ante un Betis que estaba obligado a cambiar y apretar el acelerador para poder rascar algo en el envite. La impresión era la misma que en el primer acto, a los de Simeone les podía bastar con apretar para llevarse los tres puntos del Benito Villamarín. Un disparo desde dentro del área en el que Salvio pecó de precipitación fue el primer intento serio de los colchoneros en la segunda mitad. Mel y Simeone siguieron moviendo ficha desde el banquillo. Salva Sevilla dejó su puesto a Pereira y Diego hizo lo propio con Koke instantes después.
Una clara ocasión que Domínguez mandó a las nubes a media hora de la conclusión desde el área pequeña, acabó convirtiéndose en la antesala del primer gol del partido. Un gran centro desde la izquierda de Tiago para Falcao sirvió para que el colombiano dejara de cabeza un balón franco a Koke para que el canterano fusilara a Fabricio adelantando a los suyos. El equipo madrileño no se conformó con la ventaja mínima y se lanzó a por la sentencia de forma decidida. Tan sólo tres minutos después del tanto, los rojiblancos ejecutaron a la perfección una jugada ensayada a saque de falta que permitió a Adrián disfrutar de un mano a mano con Fabricio y que resolvió el portero con una gran intervención. Acto seguido, Rubén Castro mandó al limbo un contragolpe con un disparo desviado cuando ya se cantaba el empate.
Cuando el panorama era inmejorable para el Atlético, con ventaja y tan sólo a cuatro minutos del final, todo el trabajo del conjunto colchonero se fue por el sumidero en dos acciones brillantes del Betis, que sirvieron al equipo verdiblanco para dar la vuelta al partido en tres minutos. Pozuelo empató en el 86 aprovechando un pase de Rubén Castro y Pereira logró el segundo local en la siguiente acción tras una buena jugada de equipo. Pero ahí no acabaron las sorpresas. El Atlético, que había tirado por tierra todo su trabajo, fue capaz de mantenerse en pie en medio de la zozobra para empatar en el último suspiro con un cabezazo de Falcao que le permitió salvar un punto, pero que no le permite mirar a los puestos Champions con optimismo.