El Madrid acabó muy al gusto del Bayern

En la segunda parte se fue desconfigurando el Madrid hasta perder su identidad agresiva, goleadora y autoritaria. Mourinho se la jugó sacando del campo a Özil y Di María, después a Benzema, lo que concedió terreno y dio seguridad al Bayern en el 83'. De pronto los blancos no hacían daño, con una medular tan sobrepoblada como inocua: Marcelo, Khedira, Xabi Alonso y Granero. A la vez, Cristiano dejó de ser un problema para la zaga muniquesa.

Era un escenario ideal para el Bayern en los diez minutos finales. Robben y Lahm (más suelto) se cebaron desbordando a Coentrao; Marcelo vagaba por la medular derecha; Granero, nada; Cristiano, aislado... Una situación de riesgo que se anunció con dos acciones de Mario Gómez (en una pidió penalti y en otra remató flojito de cabeza). A la tercera, gol.

Ni Mou ni el equipo estuvieron tan enteros como exigía el partido hasta el minuto final. Y los alemanes no perdonan.

Agujero letal

Coentrao perdió el apoyo de Di María (y Özil) y Robben y Lahm encontraron por ahí el carril para fabricar el gol de la victoria.

Un once plano

Minuto 83 se han ido del campo Özil, Di María y Benzema. El Madrid se fractura, se 'arruga' y el Bayern pierde el miedo.