"Mario Gómez ama a España y los españoles"

Hermann Sierra Gómez muestra su teléfono móvil mientras luce una sonrisa burlona: "Mir geth es gut, wir sind bereit für den Real Madrid", lo que en castellano significa: "Estoy bien, estamos preparados para recibir al Real Madrid". Al otro lado de ese mensaje de WhatsApp se encuentra Mario Gómez, el primo alemán de Hermann que se ha convertido en una estrella del fútbol. Como miles de granadinos de aquella época, Pepe y Torcuata, los abuelos de Mario, emigraron a Alemania en 1966 en busca de una vida mejor. Allí trabajaron, tuvieron hijos y volvieron al cabo de los años para disfrutar de su jubilación en Albuñán, un pueblo de apenas 500 habitantes que se encuentra en el norte de la provincia de Granada. Lo que nunca imaginaron es que su nieto Mario, hijo de Pepe y de una alemana de bien llamada Cristel Roth, se convirtiera en uno de los goleadores más letales del fútbol europeo y mundial.

Altar. El hotel rural La Hacienda del Marquesado está en Albuñán y no en la Selva Negra, por más que las camisetas de Alemania, del Stuttgart o el Bayern cuelguen de sus paredes. Hermann, confesor del astro hasta que regresó a Granada, ha decorado una esquina de su restaurante con los recuerdos de su primo. En una instantánea se puede ver en primer plano a Mario bajo el letrero 'Tor-rero', como le llaman en su país natal. "Tor en alemán es gol. Hacen ese juego de palabras. Es una forma muy española de llamarle goleador", comenta, mientras enseña cada rincón del santuario que el propio Mario visita cada vez que viene a España. Pero desde que le fichó el Bayern "sólo ha podido venir una vez y a escondidas, apenas puede salir".

Mario es familiar, "le gusta estar cerca de su familia", explica su primo. De hecho, sus dos equipos como profesional han sido el Stuttgart y el Bayern, el primero a 100 kilómetros de Unlingen, su pueblo natal, y el segundo, a poco más del doble. Mario sigue saliendo con la misma chica de siempre, a la que conoció con apenas 17 años. Ahora se ha comprado una finca que ha llamado 'Villa Mario' en la que ha construido una casa para sus padres, otra para su hermana y otra para formar una familia. "No sé si esto ha salido en prensa pero ha renovado por otros cuatro años", revela su primo, insistiendo en que será "difícil" que salga de Alemania aunque sea tentado por otros clubes. "Es una alemán conservador, de los de toda la vida", sentencia. Aunque deja claro no olvida sus orígenes: "Mario ama a España y los españoles".

El pequeño Mario pasó sus veranos en el pueblo granadino, jugueteando con el balón en la plaza y después dando recitales de su clase ante la mirada de sus vecinos, que ahora presumen de él. Hoy, Albuñán reposa dubitativo. Por un lado, el Madrid; por el otro, Mario Gómez, a quien siente como propio. "Lo ideal sería que Mario marcase muchos goles y que ganara el Madrid", anhela el primo español. Pero lanza un aviso: "Mario está con confianza. El Madrid va a sufrir mucho. Si sale vivo de allí, estará listo para todo...".