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Segunda B | GrUPO 1

El Castilla sigue la dictadura madridista en los derbis

Un solitario gol de Álex al poco de comenzar la segunda mitad sirve al Castilla para asegurarse los play-off y casi la primera plaza. Rigurosa expulsión de Nacho por una supuesta agresión.

Juan Antonio Pérez
El Castilla sigue la dictadura madridista en los derbis

Como si de emular a los 'mayores' se tratara, el Castilla también domina con puño de hierro sus enfrentamientos ante el filial atlético. Sirva como dato que esta temporada el conjunto de José Alberto Toril se ha impuesto en los dos choques ligueros a los de Milinko Pantic por idéntico resultado (1-0) y finalizando ambos encuentros en inferioridad numérica.

La victoria le da al filial blanco los tres puntos necesarios para asegurar el play-off, algo que se daba por hecho, y sobre todo y más importante, le afianza en una primera posición que mucho se tienen que torcer las cosas para que abandone. Una cuestión, por cierto, la del liderato del grupo, nada baladí, ya que otorga una posibilidad más para ascender.

Por su parte, el filial colchonero se despide prácticamente de sus opciones de acabar la liga entre los cuatro primeros, ya que a su derrota se une la victoria del equipo que hasta ahora marcaba la última posición que da acceso a play-off (el Albacete). Siete u ocho puntos, dependiendo del resultado del Tenerife-Lugo, cuando faltan por jugar 12, parecen tarea muy difícil de remontar. Veremos, aunque no hay nada imposible.

La mayor calidad blanca y la falta de ambición atlética tras el 1-0 podrían explicar la victoria del Castilla. El conjunto blanco creyó en todo momento en el triunfo, aún jugando toda la segunda mitad con un hombre menos, y debido a ello gozó de las mejores ocasiones. El filial atlético estuvo muy serio en la primera parte, con una defensa adelantada que apenas dejaba resquicios a los atacantes rivales, pero en el segundo acto se encontró con el gol tempranero de Álex y aunque le puso voluntad le faltó una pizca de ambición.

Ya lo decíamos. La defensa adelantada de los de Pantic en la primera mitad incomodó muchísimo al Castilla. El centro del campo blanco, capitaneado por Mosquera y Álex, robaba enseguida la pelota, pero en el momento de levantar la cabeza y contactar con los de arriba, la falta de espacios provocada por la buena presión atlética, provocaba el cortocircuito. Y otra vez vuelta a empezar. Mucho pasión por el derbi, excelente tensión competitiva de todos los futbolistas, pero muy poco de fútbol si de una cuestión estética hablamos.

Aún con todo ello, el filial blanco rompió dos veces la adelantada línea de presión atlética y a punto estuvo de hacer gol. Primero fue Jesé con un excelente pase a Alex, que a su vez puso un balón de oro en la cabeza de Joselu, y después Casado con una subida sorpresa por la izquierda para que Jesé culminara. Pero ni Joselu ni Jesé lograron marcar y el partido se iba al descanso con 0-0 y todo abierto. Del filial colchonero en ataque, poco que destacar. Si cabe una falta lateral de Fer con mucha intención.

Y sin más novedad, diríamos, el choque se fue al descanso. Y decimos diríamos si nos hubiésemos ahorrado los últimos segundos del primer acto. En ese trance, el colegiado López Amaya expulsó a Nacho por una supuesta agresión a un futbolista atlético antes de que se sacara un córner. Rigurosa expulsión si tenemos en cuenta las imágenes.

El caso es que nos quedaba un segundo acto interesantísimo con un Castilla con un hombre menos. Era de suponer que el filial atlético cogiera el mando y acorralara a su rival en su campo. Lo haría, pero habría que esperar media hora. Concretamente a los últimos quince minutos de partido. Hasta entonces, no pareció notarse la inferioridad blanca. De hecho, hasta ese último cuarto de hora el Castilla gozó de las mejores ocasiones. Dos de Joselu, una de ellas solo ante el portero, y una falta de Casado son buenos ejemplos. Y como no, el gol de Alex en el minuto 49, quien llegando desde atrás remató a gol una buena jugada de Carvajal desde la derecha.

Falta lo anteriormente enunciado: el dominio rojiblanco en los últimos minutos. No es que se tratase de un acoso y derribo, pero Ndoye y sobre todo Gerard gozaron de buenas ocasiones para rescatar al menos un punto. Sin olvidarnos de un posible penalti al '9' rojiblanco. Sea como fuere, el marcador no se movió y el Castilla logró un triunfo importantísmo en cuanto a puntos y porqué no decirlo, en cuanto a moral. Algo clave en este tramo del curso.