El Rayo añoró a Javi Fuego
El Rayo echó de menos a Javi Fuego. El mejor recuperador de balones de Primera (339) se ha fracturado la rótula de la rodilla derecha y su equipo notó su ausencia. Diamanka fue inicialmente quien hizo las funciones de mediocentro defensivo hasta que la lesión de Labaka hizo que retrasase su posición y que Trashorras entrase al terreno de juego. El senegalés hizo una labor correcta, pero no se acercó a la media de balones que roba Javi Fuego y el lucense es más creativo que destructivo.
Las circunstancias se pusieron en contra del Rayo, pero el equipo vallecano dio la cara, supo aguantar y buscar la portería de Guaita. Tanto que poco antes de que Jordi Alba marcase el 2-0, Diego Costa se enfadó, y con razón, con Paradas Romero, que no sancionó una entrada de Mathieu al brasileño cuando éste se iba derecho a portería y aquél era el último defensor. Pero si el ariete tenía razón, más aún le asistía a Arribas cuando, incrédulo, comprobó que le sancionaron con penalti por un balón que quitó limpiamente. El partido lo mató el Valencia al contragolpe. No estaba Javi Fuego para hacer faltas tácticas.