El Villarreal se destapa

El efecto Lotina está dando el resultado perseguido por el Villarreal. El nuevo almirante del Submarino ha dado un golpe de timón en el equipo amarillo y si la semana pasada debutó con un empate frente al Real Madrid, ayer estrenó el casillero de victorias contra el Rayo, en un partido en el que supo aprovechar buena parte de sus oportunidades y aguantar con firmeza atrás cuando el Rayo apretó.

El de Vallecas es el segundo triunfo a domicilio que consigue el Villarreal y con él logra un respiro y situarse a seis puntos de la zona de descenso. La derrota, la octava en casa, supuso para el Rayo retrasar la celebración del primer objetivo, la permanencia, y ver cómo se aleja la posibilidad de apuntar a otro más elevado, una plaza para una competición europea.

El partido comenzó a decantarse al filo de la media hora, cuando Cani aprovechó un error de Javi Fuego para ensayar el disparo, el balón se estrelló en el larguero, pero Marco Ruben rescató el rechace con la cabeza para abrir el camino del triunfo del Villarreal, que hasta ese momento se había mostrado más incisivo en ataque que el cuadro valllecano.

Diego López apenas tuvo que intervenir en la primera parte. El trabajo para el meta del Submarino comenzó en la segunda, cuando el Rayo casi se olvidó de las tareas defensivas para intentar una remontada similar a la que consiguió hace un par de semanas frente al Racing.

Más errores.

La entrada de Lass dio otro aire al conjunto franjirrojo en el capítulo atacante. El guineano fue una pesadilla continua para Joan Oriol.

La apuesta por la ofensiva total no dio el resultado perseguido por Sandoval y el Villarreal pudo sentenciar el encuentro en uno de sus contraataques. Fue en el instante en el que Marco Ruben dispuso de un penalti para ampliar la ventaja amarilla, en una acción que también nació en un error rayista. Esta vez de Michu. El que lo impidió fue Joel, puesto que el meta del Rayo acertó al adivinar por dónde iba a lanzar el argentino la pena máxima.

La acumulación de ocasiones franjirrojas (Armenteros, Tamudo, Arribas...) perecieron bien en las manos de Diego López, bien con el balón en la grada por falta de puntería. La más clara fue la que dispuso el argentino, en un cabezazo cuando se encontraba solo, pero el meta del Villarreal apenas tuvo que esforzarse para neutralizarlo

El partido quedó visto para sentencia en el minuto 85, en otro contragolpe del cuadro amarillo. Una asistencia perfecta de Marco Ruben permitió que Ángel batiese a Joel con un disparo raso y ajustado al poste izquierdo de la meta rayista. El Villarreal comienza a respirar.